BEIJING, 28 ago (Xinhua) -- Cuatro vacunas candidatas chinas contra la COVID-19 comenzaron la fase 3 de los ensayos clínicos, de acuerdo con el mecanismo conjunto del Consejo de Estado para la prevención y el control de la COVID-19.
Se espera que algunos ensayos de fase 3 completen la primera ronda de vacunación a principios de septiembre y se prevé que los datos preliminares estén listos para noviembre.
La fase 3 de los ensayos clínicos normalmente involucra a miles de personas para verificar la seguridad y la efectividad de las vacunas que son claves para su aprobación en el mercado.
Como la epidemia ha estado bajo control en China, el país ya no tiene las condiciones para ensayos clínicos de gran escala, por esa razón todos los ensayos de fase 3 están siendo realizados en el extranjero.
Dos vacunas inactivadas contra la COVID-19 desarrolladas por China National Biotec Group (CNBG) han sido aprobadas para la fase 3 de los ensayos clínicos en varios países en Medio Oriente y Sudamérica, involucrando a más de 30.000 personas, de acuerdo con Yang Xiaoming, presidente de CNBG.
Una vacuna inactivada de la COVID-19 desarrollada por Sinovac Biotech Co. Ltd. está en la fase 3 de los ensayos clínicos en algunos países de Sudamérica y del Sudeste Asiático, de acuerdo con Yin Weidong, presidente de Sinovac.
Una vacuna recombinante contra la COVID-19 con adenovirus defectuoso modificado como vector también está en fase 3 de ensayos.
De acuerdo con una directriz para la evaluación clínica de las vacunas contra la COVID-19 publicada recientemente por la Administración Nacional de Productos Médicos, la vacuna debe ofrecer inmunidad durante al menos seis meses y de preferencia durante más de un año.
Un total de diez vacunas contra la COVID-19 han sido aprobadas para iniciar pruebas clínicas en China. Además de las cuatro vacunas antes mencionadas que han entrado a las pruebas clínicas de fase 3, el resto incluyen vacunas de proteínas recombinantes, vacunas de ácido nucleico y vacunas que utilizan virus de la influenza atenuados como vectores.
Una vacuna de proteína recombinante desarrollada de forma conjunta por la Academia de Ciencias de China y una compañía biofarmacéutica de la provincia de Anhui se encuentra actualmente en las pruebas clínicas de fase 2.
Antes de la producción en masa se tendrá que evaluar y vigilar estrictamente la seguridad y eficiencia de todas las vacunas.
De acuerdo con el mecanismo conjunto del Consejo de Estado para la prevención y el control de la COVID-19, China aprobó una prueba piloto el 24 de junio para el uso de emergencia de vacunas contra la COVID-19 y dio luz verde a dos vacunas para uso de emergencia. El 22 de julio, el país inició de manera oficial el uso de emergencia de las vacunas contra la COVID-19.
Zheng Zhongwei, funcionario de la Comisión Nacional de Salud, dijo que ciertas personas con alto riesgo de exposición al virus y que no pueden tomar medidas de protección eficaces podrán recibir la vacuna de emergencia.
Pero quienes reciban la vacuna de emergencia también deberán tomar medidas de protección continuas.
Personal médico, trabajadores de prevención de epidemias, funcionarios de migración y quienes garantizan el funcionamiento básico de las ciudades son elegibles para la vacunación de emergencia.
Algunas personas enviadas a trabajar al extranjero han recibido las vacunas inactivadas contra la COVID-19, junto con cierto personal médico y algunas personas que trabajan en mercados.