SANTIAGO, 24 jul (Xinhua) -- El encuentro virtual que sostuvieron los cancilleres de China y de América Latina para abordar los desafíos de la pandemia, constituye la continuación o segunda fase de las relaciones históricas entre el país asiático y la región, cruzada esta vez por la cooperación en el ámbito de la salud y la esperada vacuna para la COVID-19, sostuvo la experta chilena en estudios asiáticos Constanza Jorquera.
"China lo que está haciendo es ser bastante coherente con la relación histórica que tiene con la región, asegurando esta cooperación no solo en la provisión de la vacuna misma, sino también recursos para la investigación, cooperación, considerando el tema económico", dijo la docente de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad Diego Portales durante una entrevista con Xinhua.
La académica señaló que China "se ha posicionado con este paquete de medidas de rescate financiero y médico en una región que ha sido hace bastantes años abandonada por Estados Unidos, que geopolítica e históricamente ha tenido más vínculos con esta potencia", pero que "cuando está en crisis tiende a cerrarse, busca aislarse del mundo".
La videoconferencia de los cancilleres de China y de América Latina y el Caribe sobre el combate a la pandemia de COVID-19 se celebró este jueves y fue copresidida por el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, y el consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, quien presentó cinco propuestas para salvaguardar la salud pública mundial y promover la recuperación de la economía a nivel internacional.
"Se ve que hay un acercamiento positivo, siempre habrá críticas, pero en este momento América Latina es dependiente, es una realidad, y necesita a China. Y en este caso también puede haber cooperación técnica, en relación a las lecciones aprendidas para manejar la pandemia, lo que es bastante positivo", indicó Jorquera.
Añadió que Latinoamérica enfrenta "una nueva realidad", en tanto China puede aportar con su experiencia sobrellevando esta crisis, a través de dos fases. "Una que se trata de la entrega de la ayuda y otra de cómo América Latina puede crear esa capacidad de manejarse por sí misma y de manera más virtuosa", teniendo en cuenta el beneficio mutuo y una cooperación de ganancia para las dos partes.
En esta línea, puso énfasis en los requerimientos de la región en equipamiento médico y personal de salud capacitado para superar retos como esta pandemia.
Destacó la idea de China de llevar adelante desde el inicio la llamada "diplomacia médica", vinculada directamente a la iniciativa de la Franja y la Ruta, un proyecto que pasó de dedicarse a los planes de infraestructura, conectividad y comercio, a sumar la cooperación en materia de desarrollo científico, salud y formación académica y profesional, explicó.
Jorquera abordó igualmente el rol que juega China en la recuperación de la economía global, particularmente de los países latinoamericanos, en áreas vitales como la salud en medio de la pandemia, pero también en su calidad de mayor socio comercial de esta región, gran consumidor de materias primas y productos alimenticios, entre otros.
De acuerdo con el escenario actual, ella prevé en el futuro una profundización de los lazos y la cooperación recíproca entre ambas partes, a la vez que espera un mayor entendimiento a nivel político y cultural, un mayor acercamiento y una colaboración fructífera, a través de la exploración de nuevas áreas de vinculación, más allá del eje comercial.
