BEIJING, 21 jul (Xinhua) -- Beijing no ha reportado nuevos casos confirmados de la neumonía COVID-19 durante 14 días consecutivos hasta el domingo, poniendo efectivamente bajo control el reciente rebrote de contagios relacionados con un mercado mayorista de la urbe.
A partir del 20 de julio, la capital de China ha bajado de II a III su nivel de respuesta de emergencia para hacer frente a la epidemia de neumonía COVID-19.
Entre el 11 de junio y el 5 de julio, la capital china reportó 335 casos confirmados de transmisión local, de los cuales 104 permanecen en centros de salud y 231 fueron dados de alta tras su recuperación en el Hospital Ditan de Beijing.
Luego de que la ciudad viviera un rebrote de casos de COVID-19 transmitidos localmente, en su mayoría relacionados con el mercado de productos agrícolas Xinfadi, en el distrito de Fengtai, el Gobierno municipal adoptó medidas rápidas y específicas para frenar la propagación de la enfermedad.
He aquí un vistazo sobre cómo Beijing ha controlado las nuevas infecciones en menos de un mes.
UNA INVESTIGACIÓN EPIDEMIOLÓGICA OPORTUNA
Beijing informó sobre un nuevo caso confirmado de transmisión local de COVID-19 el 11 de junio, luego de que la ciudad acumulara 57 días sin tales incidencias.
De inmediato se llevó a cabo una investigación epidemiológica que rastreó 38 contactos cercanos. Se identificaron todos los lugares que el paciente había visitado y que podrían haber estado potencialmente expuestos al virus, incluido Xinfadi.
El 12 de junio, las muestras ambientales dieron positivo para el nuevo coronavirus en el mercado mayorista. Al mismo tiempo, se llevaron a cabo más investigaciones epidemiológicas a medida que se confirmaban varios nuevos casos.
Para controlar las recientes infecciones, los centros de prevención y control de enfermedades a nivel de municipio y distrito organizaron más de 500 investigadores epidemiológicos, que eran enviados de inmediato para llevar a cabo pesquisas en en el terreno.
"Generalmente los grupos están compuestos por tres personas, dos van al área de cuarentena y el tercero es responsable del apoyo y la desinfección", detalló el investigador epidemiológico de 33 años de edad, Li Ruoxi.
Li explicó que su trabajo incluye comunicarse con el paciente y su familia sobre sus actividades recientes y el historial de contactos durante los 14 días previos a la hospitalización.
Gracias a las oportunas y efectivas investigaciones epidemiológicas, Xinfadi fue declarado como un lugar de alto riesgo dentro de las 22 horas posteriores al nuevo brote.
Beijing suspendió inmediatamente el mercado, cerró las comunidades residenciales cercanas y realizó una observación médica concentrada de los comerciantes del lugar.
CIERRES FOCALIZADOS
Para hacer frente al repunte de casos de COVID-19 transmitidos localmente, Beijing desplegó cierres focalizados en lugar de confinar a todas las personas en sus hogares.
Medidas de control precisas han sido tomadas para designar subdistritos como áreas de bajo, mediano o alto riesgo de acuerdo con su situación epidémica específica.
De esta manera, la vida de las personas en áreas de bajo riesgo se vio mínimamente afectada. Gracias al uso de códigos QR de salud que muestran los registros de viaje digitales, los repartidores y otros proveedores de servicios pudieron ingresar a comunidades residenciales y los residentes fueron capaces de acceder a ciertos lugares públicos y viajar libremente por la ciudad.
Por el contrario, fueron puestas bajo administración cerrada algunas áreas clave, bloques de apartamentos y complejos de viviendas en áreas de riesgo medio y alto.
Para evitar la propagación del virus, la ciudad reforzó el control del flujo de personal a otros destinos del país.
Por ejemplo, a las personas de zonas de riesgo medio y alto, así como aquellas relacionadas con el mercado de Xinfadi, no se les permitió salir de Beijing.
Asimismo, un certificado de prueba de ácido nucleico negativo emitido en los últimos siete días también era imprescindible para aquellos que tenían la intención de abandonar la ciudad.
Los certificados dejaron de ser necesarios para las personas de las zonas de bajo riesgo de Beijing a partir del 4 de julio, puesto que la situación epidémica había mejorado.
PRUEBAS MASIVAS
Para contener la propagación de la enfermedad, Beijing también lanzó una campaña en toda la ciudad para rastrear a las personas que habían visitado el mercado de Xinfadi desde el 30 de mayo a través de consultas puerta a puerta, llamadas telefónicas, plataformas de redes sociales y otros métodos.
Fueron sometidas a pruebas de ácido nucleico los ciudadanos que trabajaban en los mercados de productos agrícolas en cuestión, los residentes de las comunidades cercanas y las personas que visitaron las instalaciones.
La ciudad también ha priorizado las pruebas para quienes viven en áreas de riesgos medio y alto, el personal médico y aquellos que están en la primera línea de contacto con el virus, así como los empleados de los bancos, supermercados, restaurantes, empresas de mensajería, plataformas de entrega de alimentos y salones de belleza y peluquería.
Según las autoridades locales, más de 11 millones de personas en Beijing, aproximadamente la mitad de la población de la capital, se sometieron a las pruebas de ácido nucleico entre el 11 de junio y el 6 de julio.
Para hacer frente a la creciente demanda de pruebas, la capital amplió el número de instalaciones de prueba de ácido nucleico de 98, a principios de junio, hasta 184 a partir del 7 de julio.
Tres laboratorios de prueba de ácido nucleico para COVID-19, llamados "Huoyan (El ojo del fuego)", han llevado a cabo más de 1,2 millones de pruebas en Beijing en aproximadamente tres semanas. Dos de ellos son laboratorios móviles.
Los dos laboratorios inflables fueron desmantelados a partir del 11 de julio. "Después del cierre de los laboratorios, los profesionales desinfectarán cuidadosamente el medio ambiente y el sitio podrá usarse para otros fines", refirió Xiang Fei de BGI Genomics, uno de los desarrolladores de dichas instalaciones.
Beijing ha logrado contener el virus en el plazo de un mes mediante la adopción de medidas integrales, que incluyen elevar el nivel de respuesta, realizar una observación médica colectiva de contactos cercanos y llevar a cabo pruebas masivas, dijo Wang Hufeng, investigador médico de la Universidad Popular de China.
Aunque la prevención y el control de la epidemia en la capital han alcanzado un progreso notable, el nuevo coronavirus puede causar síntomas complicados y variados y resulta altamente contagioso, opinó Pang Xinghuo, subdirector del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Beijing.
"Los ciudadanos no deben relajar su vigilancia, deben continuar protegiéndose de contraer el virus y limpiar y desinfectar su entorno de vida y trabajo de forma regular", recomendó Pang.