MEXICO, 17 jun (Xinhua) -- La economía de China está dando señales positivas en su reactivación y más adelante podría registrar un cambio en los hábitos de consumo de la población tras el paso de la fase crítica del nuevo coronavirus, consideró Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero del mexicano Banco BASE.
En entrevista con Xinhua, la experta mexicana dijo que el fin del confinamiento social en algunas zonas de China está abonando en datos económicos favorables, como el aumento del 4,4 por ciento de la producción industrial de mayo anual.
En China puede tratarse de dos o tres años en recuperar los niveles previos a la crisis por la pandemia de la COVID-19, manifestó Siller, quien agregó que la economía de China podría crecer hasta un 4 por ciento este año.
La recuperación económica en el país asiático se dará de forma lenta, pero prevalecerá en la segunda mitad del año en medio de un posible viraje en los hábitos del consumidor, estimó.
"Sentimos que puede haber unos cambios en los patrones de consumo que pueden ser importantes, el hecho que se consuman más automóviles y otros productos, y que eso sea la nueva normalidad", consideró la experta.
"Todo esto en pos de la sana distancia donde la gente todavía tiene miedo o cautela ante los nuevos brotes del coronavirus", agregó.
La analista, con una Maestría en Finanzas, resaltó que el dinamismo de la actividad industrial china tiene un doble efecto positivo para el mundo al elevar, en primera instancia, la oferta de insumos para la exportación que son necesarios para otras naciones.
El segundo efecto, aunque indirecto, se refiere al hecho de que la segunda mayor economía en el mundo genere señales de confianza global, al dar muestras de una buena recuperación.
China "va a seguir teniendo un papel muy importante en el desempeño de los mercados financieros, sobre todo en el precio de las materias primas", dijo la también profesora del Departamento de Economía del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey.
