MEXICO, 5 jun (Xinhua) -- Autoridades de América Latina reconocieron hoy viernes que gracias a las cuarentenas y medidas de seguridad sanitarias, como el aislamiento social, se evitó "un sinfín de contagios" de la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19).
En Brasil, que reportó hasta la noche del jueves 614.941 casos, de los cuales han muerto 34.021, el presidente Jair Bolsonaro inauguró hoy viernes el Hospital de Campaña de Aguas Lindas, estado de Goiás (centro-oeste), una ciudad ubicada en los alrededores del Distrito Federal, a unos 50 kilómetros al suroeste de la capital Brasilia.
La unidad fue la primera de su tipo construida por el gobierno federal, a un costo de 10 millones de reales (más de 2 millones de dólares) y entregada a la administración del estado de Goiás, y atenderá exclusivamente los casos sospechosos o confirmados de la enfermedad.
En tanto, la ciudad de Sao Paulo, la más grande de Brasil y Sudamérica y la más afectada por el virus, comenzó la apertura con un horario de cuatro horas y limitación de personas de concesionarias de automóviles y oficinas de prestación de servicios.
Por su parte, el gobierno regional de Río de Janeiro pagará una pensión a los herederos de los empleados públicos de salud, seguridad y asistencia social que murieron víctimas del nuevo coronavirus, informaron fuentes oficiales.
Mientras tanto, Perú elevó a 187.400 el número de casos de la enfermedad, tras registrar 4.202 nuevos contagios en las últimas 24 horas, en las que también se reportaron 131 muertes más para totalizar los 5.162 decesos por el virus.
En medio del alza sobre la cifra de contagios, Perú ha comenzado a flexibilizar la medida de cuarentena para reactivar la economía local, que ha estado paralizada desde que inició el estado de emergencia el pasado 16 de marzo.
Frente a este nuevo panorama, el presidente del Consejo de Ministros, Vicente Zeballos, pidió a la ciudadanía demostrar "que una nueva convivencia es posible y, sobre todo, necesaria" y los exhortó a mirar "hacia el futuro poniendo la salud en primer lugar".
En Argentina, con 21.037 casos, de los cuales 632 fallecieron, el presidente Alberto Fernández dijo que la cuarentena que inició en marzo sirvió para salvar vidas y permitir que el sistema de salud estuviera en condiciones para atender a todos los que padezcan la enfermedad.
"No es una enfermedad grata, no es una enfermedad fácil, pero gracias a la cuarentena que hicimos evitamos un sinfín de contagios", señaló.
Fernández también expresó su acuerdo con habilitar de manera progresiva los entrenamientos "individuales" de los deportistas rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokio, pero no aún "los deportes en equipo".
"Habría que ver la disciplina de la que se trata. Si son deportes individuales parece más fácil. El problema más grande lo tenemos con los deportes en equipo", manifestó a la televisión local.
En Ecuador, el Ministerio de Salud Pública elevó a 3.592 las muertes y a 42.106 los casos confirmados de la enfermedad, con 58 fallecidos y 531 contagios en las últimas 24 horas.
Desde el pasado 1 de junio, y tras más de 70 días de aislamiento, el país entró en un proceso de desconfinamiento social paulatino para reactivar la debilitada economía que, según el gobierno, ha dejado de recibir 8.000 millones de dólares por los estragos de la emergencia sanitaria.
Este año, la economía de Ecuador, uno de los países más golpeados por la pandemia en América Latina, se contraerá entre el 7,3 y el 9,6 por ciento debido al impacto del virus, según estimaciones del Banco Central.
En Colombia, con 36.635 enfermos y 1.145 decesos, el ministro de Salud, Fernando Ruiz, pasó revista al sistema de salud en el puerto de Buenaventura, el principal sobre el Pacífico colombiano, donde el número de contagios ascendió considerablemente.
"Llegamos a Buenaventura para reunirnos con las autoridades y evaluar el plan de respuesta que tiene el puerto. Buscamos el desarrollo de acciones inmediatas para evitar una mayor afectación, así como una intervención precisa en los conglomerados y la realización de pruebas que permita tener un mayor control de la epidemia", expresó.
En tanto, el gobierno anunció una serie de medidas para entregar recursos a las personas que durante la pandemia no han podido pagar el Sistema General de Seguridad Social en Salud.
En Bolivia, con 12.245 contagiados y 415 defunciones, el Colegio Médico del departamento de Santa Cruz se declaró en emergencia ante el avance de los casos de la enfermedad en el país, situación que amenaza con colapsar el sistema nacional de salud.
Wilfredo Anzoátegui, presidente del colegio, lamentó que el "manejo político" que se da a la emergencia provoque una crisis sanitaria, principalmente en los departamentos de Santa Cruz (este) y Beni (noreste), que concentran el 84 por ciento del total de contagios en Bolivia.
Por su parte, Cuba, donde hay poco acceso a internet desde los hogares, apeló a la televisión en señal abierta para continuar el curso escolar, luego de la suspensión de las clases presenciales por la amenaza del nuevo coronavirus, que hasta la fecha deja 2.133 enfermos y 83 fallecimientos.
Hace poco más de dos meses, el 24 de marzo pasado, el gobierno decretó el cierre por tiempo indefinido de más de 10.000 escuelas, donde se había desarrollado el 70 por ciento de las semanas lectivas, así como las evaluaciones sistemáticas y parciales.
Se espera ahora reabrir las escuelas en septiembre venidero, luego de que se trató de un cierre inédito, pues no había ocurrido ni tras el paso de violentos huracanes, y la medida ha dejado sin clases presenciales a más de 2 millones de alumnos de todos los niveles.
Finalmente, República Dominicana reportó 18.708 casos y 525 muertes, mientras que en Costa Rica hay 1.228 enfermos y la cifra de personas fallecidas se mantiene en 10.