RÍO DE JANEIRO, 4 jun (Xinhua) -- El Senado brasileño aprobó hoy el uso obligatorio de mascarillas en locales públicos o privados accesibles al público en todo el país, y estableció que cada estado o municipio podrá determinar el importe de la multa para las personas que incumplan la ley.
La medida también abarca el transporte público, como metro y autobuses, taxis o vehículos de aplicativos y aviones. Por haber sido alterado en el Senado, el texto regresará ahora a la Cámara de Diputados, donde ya había sido aprobado, para ser votado nuevamente antes que empiece a valer.
Aquellas personas que no usen la mascarilla serán multadas, aunque el importe lo impondrán los estados y los municipios. Igualmente, el poder público deberá suministrar mascarillas a las poblaciones económicamente vulnerables, mientras que las empresas estarán obligadas a suministrar mascarillas a los empleados. Si no lo hacen serán sancionados con 300 reales (60 dólares) de multa por trabajador sin el accesorio.
En la compra de las mascarillas para los empleados públicos, el Poder Público dará prioridad a los productos fabricados por productores locales o costureras, de forma individual o mediante cooperativas de productores, observando siempre el precio del mercado.
Igualmente, los Senadores establecieron la divulgación de campañas publicitarias de interés público, informando la necesidad del uso de mascarillas de protección personas y la manera correcta de descartarlas.
La máscara no será necesaria para personas que padezcan autismo, deficientes intelectuales, deficientes sensoriales o cualquier deficiencia que impida su uso adecuadamente, ni para los menores de tres años.
El proyecto también establece que los profesionales de salud infectados por el nuevo coronavirus (COVID-19) tendrán garantizados camas y atendimiento hospitalario prioritario, mientras que los profesionales de seguridad pública tendrán preferencia en el atendimiento.
