BEIJING, 29 may (Xinhua) -- China expresó hoy viernes su fuerte insatisfacción y su firme oposición en relación con "los comentarios irresponsables y acusaciones injustificadas" de algunos países sobre la decisión de la Asamblea Popular Nacional (APN) de China sobre la legislación de seguridad nacional para Hong Kong.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian, hizo el comentario en respuesta a una declaración conjunta emitida el jueves por los ministros de Relaciones Exteriores de Estados Unidos, Reino Unido, Australia y Canadá, los cuales afirmaron que la decisión de la APN viola las obligaciones internacionales contenidas en la Declaración Conjunta Chino-Británica, y socava el marco de "un país con dos sistemas".
"Es un asunto totalmente interno de China que la APN adopte la decisión sobre el establecimiento y la mejoría del sistema legal y los mecanismos de aplicación para salvaguardar la seguridad nacional en la Región Administrativa Especial de Hong Kong (RAEHK), y ningún país extranjero tiene derecho a interferir", dijo Zhao en una rueda de prensa.
Sin embargo, ciertos países han hecho "comentarios irresponsables y acusaciones infundadas" contra la decisión de la APN, inmiscuyéndose en los asuntos de Hong Kong y en los asuntos internos de China, dijo Zhao, y agregó que la parte china ya ha presentado severas gestiones ante los países.
Zhao dijo que para cualquier país en el mundo, ya sea que tenga un sistema unitario o uno federal, la legislación relacionada con la seguridad nacional pertenece al poder legislativo del Estado. Salvaguardar la seguridad nacional se ubica en el ámbito de las autoridades centrales, tal como ocurre en todos los países, agregó.
"Ni un solo país en el mundo permite actividades que pongan en peligro la seguridad nacional incluyendo las actividades secesionistas en su territorio".
Desde que China reanudó el ejercicio de su soberanía sobre Hong Kong en 1997, el gobierno central ha administrado la RAEHK de conformidad con la Constitución y con la Ley Básica de la RAEHK más que con la Declaración Conjunta Chino-Británica, dijo el portavoz, de ahí que los países no tengan ni el fundamento legal ni el derecho de citar la Declaración Conjunta para apuntar con el dedo hacia los asuntos de Hong Kong.
Zhao dijo que Hong Kong es Hong Kong de China. Nadie está más interesado en la prosperidad y la estabilidad de la ciudad y en el bienestar fundamental de sus residentes que el gobierno central, y nadie está más resuelto que el gobierno central a implementar plena y sinceramente la política de "un país con dos sistemas" y la Ley Básica.
"Queremos exhortar a los países pertinentes a respetar la soberanía de China, a apegarse a las leyes internacionales y a las normas básicas que rigen las relaciones internacionales, a ser cautelosos con sus palabras y hechos, a dejar de interferir en los asuntos de Hong Kong y en los asuntos internos de China en cualquier forma, y a contribuir más a la prosperidad y a la estabilidad de Hong Kong y al desarrollo de los lazos bilaterales, en lugar de hacer lo contrario", agregó Zhao.
