ESPECIAL: Argentina despliega operativo sanitario y de seguridad en barrios vulnerables ante COVID-19

Actualizado 2020-05-27 07:07:33 | Spanish. xinhuanet. com

Por Juan Manuel Nievas

ARGENTINA-QUILMES-COVID-19

QUILMES, 26 mayo, 2020 (Xinhua) -- Una mujer porta una mascarilla en el asentamiento “Villa Azul” que fue cercado por la policía en la localidad de Quilmes, en la periferia sur del Gran Buenos Aires, Argentina, el 26 de mayo de 2020. Argentina comenzó a desplegar operativos sanitarios y de seguridad en barrios vulnerables donde se detectó un incremento exponencial de los casos de la enfermedad causada por el nuevo coronavirus (COVID-19). (Xinhua/Martín Zabala)

BUENOS AIRES, 26 may (Xinhua) -- Argentina comenzó a desplegar operativos sanitarios y de seguridad en barrios vulnerables donde se detectó un incremento exponencial de los casos del nuevo coronavirus.

Xinhua recorrió hoy el asentamiento precario "Villa Azul", que se extiende a lo largo de las ciudades de Quilmes y Avellaneda, en la periferia sur del Gran Buenos Aires, uno de los 1.800 distritos de escasos recursos que tiene la provincia de Buenos Aires.

En la zona se hizo presente personal de seguridad, que aisló totalmente el lugar con vallados, y médicos, enfermeros y voluntarios, que realizan entrevistas y exámenes casa por casa a los residentes del barrio, donde se confirmaron 92 casos del nuevo coronavirus en pocas horas.

"Somos 10 en una casa. No tenemos síntomas, pero a mis primas, sus maridos y a mis sobrinas les dio positivo. Tenemos miedo, pero esperamos que pase pronto", dijo a la prensa Claudio Martínez, quien se gana la vida recogiendo cartones.

La preocupación de Martínez, de 46 años, se repite con las otras 12.000 personas que viven allí en condiciones de hacinamiento y sin acceso a servicios básicos, como agua potable.

El lugar se observa militarizado, con la presencia de unos 300 efectivos de la Unidad Táctica de la Policía Bonaerense, que custodian los 35 ingresos al barrio y tienen la orden de mantenerlo aislado al menos los próximos 14 días.

Las únicas personas que pueden ingresar son médicos, enfermeros y voluntarios que entrevistan a los habitantes en la búsqueda de casos de COVID-19.

"Estar en este momento con los vecinos que necesitan una mano es una responsabilidad social", dijo Román, uno de los voluntarios del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad, cartera que entrega paquetes con 15 kilogramos de alimentos y artículos de limpieza.

El personal sanitario integra el Programa Detectar (Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Terreno de Argentina) y recorre el lugar con trajes especiales de color blanco, cubrebotas, guantes, mascarillas sanitarias y antiparras.

Los residentes que manifiestan haber tenido síntomas de la enfermedad son llevados a un centro sanitario móvil instalado en la esquina de las calles Sargento Cabral y Chubut, donde se realizan estudios cuyo resultado se conoce en unas 24 horas.

El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, dijo que la decisión de aislar a "Villa Azul" ante el aumento de contagios "fue consensuada" con los alcaldes de Quilmes y Avellaneda y referentes del barrio.

El aislamiento busca "proteger a grupos vulnerables del barrio. Se decidió cortar la cadena de contagios masivos. Cada barrio es como un paciente y hay que aplicarle un tratamiento distinto de acuerdo a sus características", dijo el funcionario.

"Estamos con el corazón en la boca, preocupados por la situación, que esperamos se termine pronto, porque necesitamos salir para ir a nuestros trabajos", dijo por su parte la vecina María Lucero.

El ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque, dijo a la prensa local que la cartera a su cargo trabaja para llevar soluciones a los vecinos.

"Es lógico que se genere alguna ansiedad en todo esto. Es un montón de demanda que estamos resolviendo y lo vamos a resolver lo más rápido posible", señaló el funcionario.

Argentina, en cuarentena por la COVID-19 del 20 de marzo al 7 de junio, ha confirmado 12.628 personas con la enfermedad, de las cuales 4.167 se recuperaron y 471 fallecieron.

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Por Juan Manuel Nievas

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QUILMES, 26 mayo, 2020 (Xinhua) -- Una mujer porta una mascarilla en el asentamiento “Villa Azul” que fue cercado por la policía en la localidad de Quilmes, en la periferia sur del Gran Buenos Aires, Argentina, el 26 de mayo de 2020. Argentina comenzó a desplegar operativos sanitarios y de seguridad en barrios vulnerables donde se detectó un incremento exponencial de los casos de la enfermedad causada por el nuevo coronavirus (COVID-19). (Xinhua/Martín Zabala)

BUENOS AIRES, 26 may (Xinhua) -- Argentina comenzó a desplegar operativos sanitarios y de seguridad en barrios vulnerables donde se detectó un incremento exponencial de los casos del nuevo coronavirus.

Xinhua recorrió hoy el asentamiento precario "Villa Azul", que se extiende a lo largo de las ciudades de Quilmes y Avellaneda, en la periferia sur del Gran Buenos Aires, uno de los 1.800 distritos de escasos recursos que tiene la provincia de Buenos Aires.

En la zona se hizo presente personal de seguridad, que aisló totalmente el lugar con vallados, y médicos, enfermeros y voluntarios, que realizan entrevistas y exámenes casa por casa a los residentes del barrio, donde se confirmaron 92 casos del nuevo coronavirus en pocas horas.

"Somos 10 en una casa. No tenemos síntomas, pero a mis primas, sus maridos y a mis sobrinas les dio positivo. Tenemos miedo, pero esperamos que pase pronto", dijo a la prensa Claudio Martínez, quien se gana la vida recogiendo cartones.

La preocupación de Martínez, de 46 años, se repite con las otras 12.000 personas que viven allí en condiciones de hacinamiento y sin acceso a servicios básicos, como agua potable.

El lugar se observa militarizado, con la presencia de unos 300 efectivos de la Unidad Táctica de la Policía Bonaerense, que custodian los 35 ingresos al barrio y tienen la orden de mantenerlo aislado al menos los próximos 14 días.

Las únicas personas que pueden ingresar son médicos, enfermeros y voluntarios que entrevistan a los habitantes en la búsqueda de casos de COVID-19.

"Estar en este momento con los vecinos que necesitan una mano es una responsabilidad social", dijo Román, uno de los voluntarios del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad, cartera que entrega paquetes con 15 kilogramos de alimentos y artículos de limpieza.

El personal sanitario integra el Programa Detectar (Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Terreno de Argentina) y recorre el lugar con trajes especiales de color blanco, cubrebotas, guantes, mascarillas sanitarias y antiparras.

Los residentes que manifiestan haber tenido síntomas de la enfermedad son llevados a un centro sanitario móvil instalado en la esquina de las calles Sargento Cabral y Chubut, donde se realizan estudios cuyo resultado se conoce en unas 24 horas.

El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, dijo que la decisión de aislar a "Villa Azul" ante el aumento de contagios "fue consensuada" con los alcaldes de Quilmes y Avellaneda y referentes del barrio.

El aislamiento busca "proteger a grupos vulnerables del barrio. Se decidió cortar la cadena de contagios masivos. Cada barrio es como un paciente y hay que aplicarle un tratamiento distinto de acuerdo a sus características", dijo el funcionario.

"Estamos con el corazón en la boca, preocupados por la situación, que esperamos se termine pronto, porque necesitamos salir para ir a nuestros trabajos", dijo por su parte la vecina María Lucero.

El ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque, dijo a la prensa local que la cartera a su cargo trabaja para llevar soluciones a los vecinos.

"Es lógico que se genere alguna ansiedad en todo esto. Es un montón de demanda que estamos resolviendo y lo vamos a resolver lo más rápido posible", señaló el funcionario.

Argentina, en cuarentena por la COVID-19 del 20 de marzo al 7 de junio, ha confirmado 12.628 personas con la enfermedad, de las cuales 4.167 se recuperaron y 471 fallecieron.

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