Personas portan mascarillas mientras esperan un autobús en la ciudad de Montevideo, capital de Uruguay, el 6 de mayo de 2020. La zona del Centro de Montevideo busca volver a la actividad comercial “normal”, luego de casi un mes y medio con cerca del 70 por ciento de sus negocios cerrados debido a la emergencia sanitaria por la enfermedad causada por el nuevo coronavirus (COVID-19). De acuerdo con el recuento del miércoles del Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, Uruguay registra 670 casos confirmados y 17 decesos por la COVID-19. (Xinhua/Nicolás Celaya)
MONTEVIDEO, 5 may (Xinhua) -- Uruguay acumula desde el 13 de marzo 670 casos de COVID-19, 17 de ellos mortales, tras confirmar hoy 13 nuevos positivos, informó esta noche el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae).
Del total de personas contagiadas, 185 tienen la infección en curso -10 de ellos están hospitalizadas en cuidados intensivos- y 468 ya se recuperaron.
Este martes se realizaron 1.006 análisis y desde que comenzó la epidemia 23.811 test, con 767 positivos, aunque esa cifra incluye a personas que dieron positivo más de un test.
La epidemia está concentrada en la capital, Montevideo (con 143 activos de un total de 185), y hay personas contagiadas en otros cinco de los 19 departamentos en los que se divide el país.
Uruguay está en un proceso de normalización de algunas actividades que incluyó las semanas previas el retorno de la construcción y algunas escuelas rurales y esta semana la reapertura de los comercios ubicados en avenidas y de las oficinas estatales.
El presidente Luis Lacalle Pou dijo que prevén "nuevas aperturas" gracias al "buen uso de la libertad" demostrado por los uruguayos durante la pandemia y que la exhortación al "aislamiento social" hizo que Uruguay no tenga como otros países "un desarrollo importante de la pandemia".
Tras decretarse la emergencia sanitaria el 13 de marzo, con la detección de los primeros casos, se definió la prohibición de los espectáculos públicos, la suspensión de las clases de la enseñanza, el cierre de los grandes centros comerciales y se exhortó al "aislamiento social".
Como respuesta a la pandemia el gobierno creó el Fondo Coronavirus para atender las necesidades sanitarias y sociales, que se nutrirá con aportes de recortes en los salarios elevados del Estado, utilidades de empresas públicas y préstamos de organismos multilaterales de crédito.