ESPECIAL: Residentes confeccionan mascarillas caseras en Argentina ante pandemia de COVID-19

Actualizado 2020-04-09 09:03:32 | Spanish. xinhuanet. com

ARGENTINA-BUENOS AIRES-COVID-19

Un hombre porta una mascarilla de fabricación casera como medida preventiva contra la enfermedad causada por el nuevo coronavirus (COVID-19) mientras observa su teléfono móvil, en la ciudad de Buenos Aires, capital de Argentina, el 8 de abril de 2020. La propagación del COVID-19 en Argentina y la necesidad de destinar las mascarillas de alta eficacia únicamente para el personal de salud ha motivado a los residentes a confeccionar esos dispositivos de manera casera. (Xinhua/Martín Zabala)

BUENOS AIRES, 8 abr (Xinhua) -- La propagación del nuevo coronavirus (COVID-19) en Argentina y la necesidad de destinar las mascarillas de alta eficacia únicamente para el personal de salud ha motivado a los residentes a confeccionar esos dispositivos de manera casera.

El presidente argentino, Alberto Fernández, se pronunció este miércoles a favor del uso de la mascarillas de fabricación casera por parte de la población.

"Lo que abunda no daña. Si cubrimos la boca y la nariz, ayudamos a que el contagio sea más difícil. Para eso, podemos hacer barbijos (piezas para cubrir la boca y la nariz) caseros", dijo el jefe de Estado durante una entrevista que concedió al canal 13, de Buenos Aires.

La recomendación oficial para que los residentes confeccionen sus propios elementos obedece a que las mascarillas de venta comercial "no van a alcanzar para todos, porque no da abasto el mercado", según explicó el mandatario.

Verónica Breke es madre de cuatro hijas y las farmacias del barrio en que reside, San Cristóbal, en el centro de Buenos Aires, no tienen mascarillas a la venta, por lo que se decidió a confeccionarlas por su cuenta.

"En casa somos seis personas y la recomendación del gobierno ahora es, si hay que salir a la calle, hacerlo con barbijos, pero cada vez que quisimos comprar, el local no tenía. Ahora los hacemos en casa con las chicas. Además es entretenido para pasar la tarde durante la cuarentena", dijo a Xinhua la mujer, ama de casa.

En la ciudad de Bahía Blanca, 700 kilómetros al sur de Buenos Aires, las amigas Mercedes Lorenzetti y Norma Rodríguez, ambas pensionistas, confeccionan mascarillas para todos los vecinos del edificio en el que viven, ubicado en la calle Moreno 45.

"Tenemos todo lo que se necesita, tela de algodón, agujas, hilo, bandas elásticas y tijeras", contó Mercedes a esta agencia, mientras que Norma agregó: "Entre las dos hacemos entre cinco y siete barbijos cada día".

La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, explicó este miércoles que el uso de mascarillas caseras es una medida de protección "adicional" para evitar la propagación de la COVID-19, aunque advirtió que no elimina la necesidad de distanciamiento social y no "reemplaza" otras recomendaciones, como el lavado de manos y superficies, y la ventilación de ambientes.

Además, enfatizó durante una conferencia de prensa que las mascarillas de "alta eficacia son insumos críticos a nivel mundial" y deben reservarse para el personal de salud.

En Buenos Aires, capital del país, el alcalde Horacio Rodríguez Larreta dijo a la prensa que quien sale a la calle debe "taparse la boca", aunque remarcó que ello "no reemplaza la decisión de fondo", que es guardar aislamiento.

El funcionario aclaró que los particulares "no tienen que usar el barbijo profesional, esos hay que cuidarlos para todos los trabajadores de la salud. Pero sí hay que taparse la boca".

Víctor Rodríguez es el encargado de un edificio de departamentos en el barrio de Colegiales, al norte de Buenos Aires, y, por su labor, debe salir a la calle a diario: "Me hice los barbijos yo mismo, porque no quiero gastar plata en comprarlos, además, no sé si yendo a una farmacia voy a conseguir. Con una tijera, camisas viejas de algodón y pegamento, me hice cinco, al menos para tener por dos o tres semanas más", contó el hombre.

Voceros del Ministerio de Salud recordaron a esta agencia que "el barbijo casero no está recomendado para todo el país, sino para zonas con transmisión local o comunitaria de la enfermedad. Quienes los confeccionen, podrán lavarlos con jabón manual o en lavarropas".

Según el último reporte del Ministerio de Salud Argentina, actualizado a la noche del miércoles 8 de abril, en el país hay un total de 1.795 casos confirmados de COVID-19, de los cuales 358 se recuperaron y 65 fallecieron.

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Un hombre porta una mascarilla de fabricación casera como medida preventiva contra la enfermedad causada por el nuevo coronavirus (COVID-19) mientras observa su teléfono móvil, en la ciudad de Buenos Aires, capital de Argentina, el 8 de abril de 2020. La propagación del COVID-19 en Argentina y la necesidad de destinar las mascarillas de alta eficacia únicamente para el personal de salud ha motivado a los residentes a confeccionar esos dispositivos de manera casera. (Xinhua/Martín Zabala)

BUENOS AIRES, 8 abr (Xinhua) -- La propagación del nuevo coronavirus (COVID-19) en Argentina y la necesidad de destinar las mascarillas de alta eficacia únicamente para el personal de salud ha motivado a los residentes a confeccionar esos dispositivos de manera casera.

El presidente argentino, Alberto Fernández, se pronunció este miércoles a favor del uso de la mascarillas de fabricación casera por parte de la población.

"Lo que abunda no daña. Si cubrimos la boca y la nariz, ayudamos a que el contagio sea más difícil. Para eso, podemos hacer barbijos (piezas para cubrir la boca y la nariz) caseros", dijo el jefe de Estado durante una entrevista que concedió al canal 13, de Buenos Aires.

La recomendación oficial para que los residentes confeccionen sus propios elementos obedece a que las mascarillas de venta comercial "no van a alcanzar para todos, porque no da abasto el mercado", según explicó el mandatario.

Verónica Breke es madre de cuatro hijas y las farmacias del barrio en que reside, San Cristóbal, en el centro de Buenos Aires, no tienen mascarillas a la venta, por lo que se decidió a confeccionarlas por su cuenta.

"En casa somos seis personas y la recomendación del gobierno ahora es, si hay que salir a la calle, hacerlo con barbijos, pero cada vez que quisimos comprar, el local no tenía. Ahora los hacemos en casa con las chicas. Además es entretenido para pasar la tarde durante la cuarentena", dijo a Xinhua la mujer, ama de casa.

En la ciudad de Bahía Blanca, 700 kilómetros al sur de Buenos Aires, las amigas Mercedes Lorenzetti y Norma Rodríguez, ambas pensionistas, confeccionan mascarillas para todos los vecinos del edificio en el que viven, ubicado en la calle Moreno 45.

"Tenemos todo lo que se necesita, tela de algodón, agujas, hilo, bandas elásticas y tijeras", contó Mercedes a esta agencia, mientras que Norma agregó: "Entre las dos hacemos entre cinco y siete barbijos cada día".

La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, explicó este miércoles que el uso de mascarillas caseras es una medida de protección "adicional" para evitar la propagación de la COVID-19, aunque advirtió que no elimina la necesidad de distanciamiento social y no "reemplaza" otras recomendaciones, como el lavado de manos y superficies, y la ventilación de ambientes.

Además, enfatizó durante una conferencia de prensa que las mascarillas de "alta eficacia son insumos críticos a nivel mundial" y deben reservarse para el personal de salud.

En Buenos Aires, capital del país, el alcalde Horacio Rodríguez Larreta dijo a la prensa que quien sale a la calle debe "taparse la boca", aunque remarcó que ello "no reemplaza la decisión de fondo", que es guardar aislamiento.

El funcionario aclaró que los particulares "no tienen que usar el barbijo profesional, esos hay que cuidarlos para todos los trabajadores de la salud. Pero sí hay que taparse la boca".

Víctor Rodríguez es el encargado de un edificio de departamentos en el barrio de Colegiales, al norte de Buenos Aires, y, por su labor, debe salir a la calle a diario: "Me hice los barbijos yo mismo, porque no quiero gastar plata en comprarlos, además, no sé si yendo a una farmacia voy a conseguir. Con una tijera, camisas viejas de algodón y pegamento, me hice cinco, al menos para tener por dos o tres semanas más", contó el hombre.

Voceros del Ministerio de Salud recordaron a esta agencia que "el barbijo casero no está recomendado para todo el país, sino para zonas con transmisión local o comunitaria de la enfermedad. Quienes los confeccionen, podrán lavarlos con jabón manual o en lavarropas".

Según el último reporte del Ministerio de Salud Argentina, actualizado a la noche del miércoles 8 de abril, en el país hay un total de 1.795 casos confirmados de COVID-19, de los cuales 358 se recuperaron y 65 fallecieron.

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