QUITO, 16 mar (Xinhua) -- El Ministerio del Ambiente de Ecuador dispuso hoy la "restricción completa" del ingreso de visitantes al Parque Nacional y la Reserva Marina de Galápagos, áreas protegidas del archipiélago del mismo nombre, para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
La entidad indicó en un comunicado que tomó la decisión en concordancia con la emergencia sanitaria decretada por el gobierno el pasado 11 de marzo, después de la declaración de pandemia hecha por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Explicó que la medida se tomó "luego de la valoración de la afluencia de visitantes locales, nacionales y extranjeros, que acuden diariamente a los sitios de visita en las áreas protegidas de las Islas Galápagos".
La región insular de Galápagos, ubicada a 970 kilómetros de la costa continental de Ecuador, fue declarada Patrimonio Natural de la Humanidad en 1978 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
La región alberga a las famosas islas Galápagos, que se destacan por las numerosas especies endémicas que poseen y que sirvieron como laboratorio al científico naturalista inglés, Charles Darwin, para establecer su teoría de la evolución de las especies.
De acuerdo al anuncio del Ministerio del Ambiente, las medidas de prevención y seguridad establecidas son necesarias para precautelar la salud de los visitantes, funcionarios y comunidades locales que habitan esas zonas.
El Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos dispuso a su vez que desde las 00:00 hora local (05:00 GMT) del 15 de marzo, toda persona extranjera o nacional que provenga del exterior, deberá realizar aislamiento preventivo obligatorio en el continente durante 14 días antes de su ingreso a las islas.
Las personas que viajen a Galápagos desde la parte continental serán evaluadas antes del traslado por parte del personal médico del Ministerio de Salud.
En caso de que estas personas presenten síntomas de COVID-19 no serán admitidas en Galápagos.
Las autoridades aclararon que hasta ahora "no existen casos sospechosos ni confirmados de COVID-19 en el archipiélago", pero se fortalecen "las medidas de prevención".