ESPECIAL: Bolivia muestra arraigada tradición de carnavales

Actualizado 2020-02-22 05:13:36 | Spanish. xinhuanet. com

Por René Quenallata Paredes

LA PAZ, 21 feb (Xinhua) -- Las decenas de carnavales que se celebran en Bolivia son muestra de que el país tiene una arraigada tradición con características propias, destacaron expertos.

El sociólogo e investigador, Joaquín Gironda, dijo a Xinhua que aunque Bolivia vive momentos de incertidumbre política, económica y social, "no impide que la gente se sume a las tradiciones de las fiestas de carnaval", con características de cada región.

"Ya se dieron rienda suelta desde el anterior jueves de compadres, luego de comadres, la anata andina, el festival de bandas y otras festividades representativas", recordó.

En Bolivia tienen lugar carnavales tradicionales que van desde los compadres o comadres en Tarija (sur), el folclor en Oruro (oeste), el corso de Santa Cruz (este), y la anata andina en La Paz (oeste).

También tienen lugar el Tata Q´aqcha minero de Potosí (suroeste), el ancestral martes de challa y el corso de tentación de Cochabamba (centro), entre otros.

En 2019, el Ministerio de Culturas y Turismo presentó un manual que registró 145 carnavales que se realizan en el país andino, de los cuales 10 tienen la declaratoria de Patrimonio Cultural Inmaterial mediante leyes nacionales.

Cada una de estas festividades se realiza de acuerdo a las danzas y cultura de las regiones, y sólo el de Oruro es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

Gironda explicó que el carnaval es una celebración popular que tiene lugar inmediatamente antes de la cuaresma cristiana, que se inicia con el miércoles de ceniza, y que tiene fecha variable.

"En Bolivia, el carnaval combina elementos de religiosidad, tradiciones ancestrales, modernidad, y se acomoda perfectamente a la globalización con folclor, ritos patrimoniales, disfraces, grupos de música, desfiles y fiestas en la calle", precisó.

"Eso es parte de la cultura diversa de Bolivia", abundó.

Para el sociólogo, esta festividad se vive de distintas formas, porque tiene que ver con la percepción de la festividad de cada persona y su entorno.

"Es fruto de la cultura, de cómo entendemos la vida y depende de las condiciones donde está cada uno", dijo.

El experto detalló que la celebración tiene sus características y diferencias marcadas, tanto a nivel departamental como local, pero confluyen en su significado, que es alegría y tiempo de agradecimiento.

"El carnaval en el país tiene peculiaridades diferentes a otros países en el martes de challa, cuando se agradece a la Pacahamama (Madre Tierra); es el tiempo de alegrarse en familia, en comunidad", manifestó.

"Es tiempo de agradecer por lo que tenemos materialmente, pero también para pedir", agregó.

En tanto, Rolando Encinas, investigador y director de la Orquesta Música de Maestros, explicó a Xinhua que las tradiciones, y mitos religiosos y paganos afloran en los carnavales bolivianos, dependiendo de la región donde se celebre.

"Son realidades distintas las que se viven, uno es el carnaval urbano donde prima el derroche, la farándula, la fiesta, tradiciones, y otro el rural, donde la fiesta está relacionada con la cosecha, la fertilidad y la música", subrayó.

Los festejos de carnaval comienzan con el jueves de compadres y comadres, en el que los hombres de cada pueblo en Tarija se reúnen en casas de familias o sedes de comparsas tradicionales para intercambiar presentes en una canasta repleta de frutas y dulces.

De igual forma, Encinas destacó que el carnaval de Oruro representa la mayor demostración cultural en Bolivia, tradición que en 2001 fue declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

A decir del investigador, el carnaval en Bolivia es una de las expresiones máximas de la cultura, a cuyos cambios se va adaptando.

 
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ESPECIAL: Bolivia muestra arraigada tradición de carnavales

Spanish.xinhuanet.com 2020-02-22 05:13:36

Por René Quenallata Paredes

LA PAZ, 21 feb (Xinhua) -- Las decenas de carnavales que se celebran en Bolivia son muestra de que el país tiene una arraigada tradición con características propias, destacaron expertos.

El sociólogo e investigador, Joaquín Gironda, dijo a Xinhua que aunque Bolivia vive momentos de incertidumbre política, económica y social, "no impide que la gente se sume a las tradiciones de las fiestas de carnaval", con características de cada región.

"Ya se dieron rienda suelta desde el anterior jueves de compadres, luego de comadres, la anata andina, el festival de bandas y otras festividades representativas", recordó.

En Bolivia tienen lugar carnavales tradicionales que van desde los compadres o comadres en Tarija (sur), el folclor en Oruro (oeste), el corso de Santa Cruz (este), y la anata andina en La Paz (oeste).

También tienen lugar el Tata Q´aqcha minero de Potosí (suroeste), el ancestral martes de challa y el corso de tentación de Cochabamba (centro), entre otros.

En 2019, el Ministerio de Culturas y Turismo presentó un manual que registró 145 carnavales que se realizan en el país andino, de los cuales 10 tienen la declaratoria de Patrimonio Cultural Inmaterial mediante leyes nacionales.

Cada una de estas festividades se realiza de acuerdo a las danzas y cultura de las regiones, y sólo el de Oruro es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

Gironda explicó que el carnaval es una celebración popular que tiene lugar inmediatamente antes de la cuaresma cristiana, que se inicia con el miércoles de ceniza, y que tiene fecha variable.

"En Bolivia, el carnaval combina elementos de religiosidad, tradiciones ancestrales, modernidad, y se acomoda perfectamente a la globalización con folclor, ritos patrimoniales, disfraces, grupos de música, desfiles y fiestas en la calle", precisó.

"Eso es parte de la cultura diversa de Bolivia", abundó.

Para el sociólogo, esta festividad se vive de distintas formas, porque tiene que ver con la percepción de la festividad de cada persona y su entorno.

"Es fruto de la cultura, de cómo entendemos la vida y depende de las condiciones donde está cada uno", dijo.

El experto detalló que la celebración tiene sus características y diferencias marcadas, tanto a nivel departamental como local, pero confluyen en su significado, que es alegría y tiempo de agradecimiento.

"El carnaval en el país tiene peculiaridades diferentes a otros países en el martes de challa, cuando se agradece a la Pacahamama (Madre Tierra); es el tiempo de alegrarse en familia, en comunidad", manifestó.

"Es tiempo de agradecer por lo que tenemos materialmente, pero también para pedir", agregó.

En tanto, Rolando Encinas, investigador y director de la Orquesta Música de Maestros, explicó a Xinhua que las tradiciones, y mitos religiosos y paganos afloran en los carnavales bolivianos, dependiendo de la región donde se celebre.

"Son realidades distintas las que se viven, uno es el carnaval urbano donde prima el derroche, la farándula, la fiesta, tradiciones, y otro el rural, donde la fiesta está relacionada con la cosecha, la fertilidad y la música", subrayó.

Los festejos de carnaval comienzan con el jueves de compadres y comadres, en el que los hombres de cada pueblo en Tarija se reúnen en casas de familias o sedes de comparsas tradicionales para intercambiar presentes en una canasta repleta de frutas y dulces.

De igual forma, Encinas destacó que el carnaval de Oruro representa la mayor demostración cultural en Bolivia, tradición que en 2001 fue declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

A decir del investigador, el carnaval en Bolivia es una de las expresiones máximas de la cultura, a cuyos cambios se va adaptando.

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