BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen (c) y Chen Meiru (i) recibiendo un control de temperatura al ingresar el Hospital Ditan de Beijing, en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)
BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen (d) ayudando a Chen Meiru (i) a ponerse su traje de protección en el hospital en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)
BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen (d) y Chen Meiru (i) ayudándose a revisarse las gafas antes de entrar en un área contaminada en el hospital en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)
BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen (i) y Chen Meiru (d) posando en el área de salas en el hospital en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)
BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen (i) y Chen Meiru (d) realizando preparativos antes de entrar en un área contaminada en el hospital en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)
BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen y Chen Meiru aplicando tratamiento médico a un paciente en el hospital en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)
BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen (d) y Chen Meiru (i) observando un programa de noticias sobre el COVID-19 luego del trabajo, en su dormitorio en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)
BEIJING, 14 febrero, 2020 (Xinhua) -- Imagen del 13 de febrero de 2020 de Pang Zhen (d) y Chen Meiru (i) caminando tomados de la mano en su camino al trabajo en el Hospital Ditan de Beijing, en Beijing, capital de China. Pang Zhen y Chen Meiru, una pareja casada, trabajan como enfermeros en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Ditan de Beijing afiliado a la Universidad Médica Capital. Su departamento, que incluye a 16 médicos y 61 enfermeros, comenzó a recibir a pacientes con COVID-19 desde enero. "Somos familia después del trabajo y camaradas en la lucha contra la epidemia. Nos esforzaremos por ganar la batalla", dijo Pang Zhen. (Xinhua/Zhang Yuwei)