BEIJING, 27 sep (Xinhua) -- Miguel Ángel Ramírez, embajador de Cuba en China, destacó que los logros alcanzados durante los 70 años desde la fundación de la República Popular China han sido el mejor ejemplo para que Cuba construya el socialismo con sus propias características.
"Durante los 70 años, China se ha convertido en una potencia internacional con el importante desarrollo de la industria, la tecnología, especialmente con el gran amor para su pueblo. Es un milagro que aproximadamente 1.400 millones de sus habitantes se estén convirtiendo en una población con la mayoría de sus necesidades ya satisfechas. Así que China ha dado un buen ejemplo para toda la humanidad", explicó Ramírez, durante una entrevista realizada recientemente en la Embajada cubana en China.
Ramírez resaltó que es también un ejemplo significativo para países como Cuba.
"Tratamos de construir el socialismo con nuestras propias características para ver que el socialismo es posible, sostenible y puede ser desarrollado", destacó.
El 28 de septiembre del 1960, la República Popular China estableció relaciones diplomáticas con la República de Cuba. Al recordar los 59 años de amistad, Ramírez lo definió como un punto dramático y un punto de inflexión no solo para Cuba "en su nueva política exterior", sino también para China "en su intento de aumentar y mejorar sus relaciones internacionales".
El embajador afirmó que desde entonces, las relaciones bilaterales entre Cuba y China se han desarrollado rápidamente. Ahora, China se ha convertido en el segundo mayor socio comercial de Cuba, y la influencia china ha penetrado en la mayoría de los sectores de la sociedad cubana.
"Por ejemplo, los productos y servicios de calidad que ofrece Yutong, el mayor fabricante chino de autobuses, han facilitado enormemente el transporte de nuestro país y han ganado la confianza y el afecto del pueblo cubano", dijo el diplomático.
Al hablar del Sueño Chino, el sueño más grandioso abrigado por el pueblo chino desde la época moderna: la materialización de la gran revitalización de la nación china, el embajador comentó que es algo que mucha gente también debería tener. "Creo que ese sueño es también nuestro sueño, porque en nuestra constitución, mencionamos que Cuba llegará a ser una sociedad tan próspera, civilizada y moderna que es un poco similar al sueño de China".
Además, recordó la historia que representa la profunda amistad entre ambos pueblos. Hace casi 172 años, alrededor de 150.000 chinos llegaron a Cuba y se mezclaron con la población local.
"Ellos forman parte de nuestra propia cultura. Tenemos uno de los barrios chinos más importantes de América Latina, y nuestra comida también está influenciada por la cultura china. Entonces, cuando hablamos de China no estamos aludiendo a un país al otro lado del universo sino algo que se percibe en el corazón", aseveró Ramírez.
Con ocasión del otorgamiento de la Medalla de la Amistad a Raúl Castro, el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, anunciado el pasado 17 de septiembre por la República Popular China, el embajador afirmó que el gobierno cubano, el Partido Comunista de Cuba y todo el pueblo están muy contentos y muy agradecidos porque se han realizado grandes contribuciones al fortalecimiento de las relaciones bilaterales entre Cuba y China.
Este año, Ramírez terminará su misión como embajador cubano en China. "Llevo tres años aquí. Francamente diría que esta ha sido la experiencia más importante de mi vida", indicó.
"Con motivo del 70º aniversario de la fundación de la República Popular China, deseo que el pueblo chino tenga un futuro exitoso, una familia unida y pueda cumplir sus sueños, no sólo los sueños personales, sino también los sueños de la nación, y que los lazos futuros entre China y Cuba sigan creciendo", agregó el embajador.