SANTIAGO, 4 sep (Xinhua) -- El gobierno chileno adjudicó hoy el estudio de factibilidad del proyecto de cable submarino de fibra óptica "Puerta Digital Asia-Sudamérica", que busca crear la primera carretera digital entre ambos continentes.
El ganador fue el consorcio conformado por las empresas Telecommunications Management Group Inc (TMG) y WFN Strategies LLC, las cuales, según el gobierno, "poseen una vasta experiencia en la realización de estudios similares que han resultado en proyectos exitosos".
El Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones chileno (MTT), a través de la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), encargó el informe de factibilidad económica, técnica y legal de la iniciativa a dichas empresas.
En el proceso se recibieron ocho propuestas de importantes empresas y consultoras del rubro, tanto nacionales como internacionales, señaló el ministerio.
En esta línea, el consorcio TMG-WFN fue quien entregó la propuesta más completa en los diversos aspectos de las bases.
El consorcio recibirá 2 millones 982.532 dólares del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), institución con la cual el MTT firmó en julio pasado un acuerdo de financiamiento del estudio.
La parte responsable debe comenzar a trabajar desde el día siguiente de la adjudicación, y durante todo el primer semestre de 2020.
"Nuestro principal objetivo es hacer de Chile un Hub Digital de América Latina, región que cuenta con un gran potencial de usuarios, y el cable submarino Asia-Sudamérica, sin duda, contribuye a eso", señaló la ministra de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt.
El proyecto, además, "permitirá que nuestro país enfrente de mejor manera la revolución digital, facilitando la instalación de 'data centers', el intercambio comercial, el emprendimiento y la creación de nuevos negocios entre ambos continentes", añadió.
Por su parte, la subsecretaria Pamela Gidi aseguró que una vez finalizado el proyecto "será la piedra angular para consolidar las economías digitales locales, trayendo beneficios para los usuarios y para todos los sectores productivos".
Con este proyecto se pretende conectar Sudamérica con el continente asiático mediante el despliegue de un cable de fibra óptica submarino, cuyo trazado potencial comprende una distancia aproximada de 24.000 kilómetros, según se informó.
Este proyecto, liderado por Chile, ha recibido el respaldo de Argentina, Brasil y Ecuador.