ESPECIAL: Un café con amor: La historia de un salvadoreño y su pasión por China

Actualizado 2019-08-20 18:31:54 | Spanish. xinhuanet. com

Por Zhang Tuo, Zhang Yuanpei y Yang Guanyu

Vásquez y Tong eligiendo granos de café en su tostador el 11 de agosto de 2019 en la ciudad de Qionghai,en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua/Yang Guanyu)

HAIKOU, 20 ago (Xinhua) -- Una tarde de pleno verano, en un tostador de café ubicado en la ciudad de Qionghai, en la provincia meridional china de Hainan, el salvadoreño Hebert Vásquez y su esposa china Tong Taohui intentaban crear un nuevo sabor mediante la combinación de granos chinos y salvadoreños.

La pareja trasnacional denominó este café "primer aniversario", con motivo de la conmemoración del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y El Salvador el 21 de agosto del 2018, una fecha importante para ellos.

Vásquez, de 42 años, cursó un postdoctorado en pesquería y su investigación se centra en las ostras. Se enamoró de Tong en 2011, cuando los dos estudiaban en la misma universidad en Japón. Después de terminar el doctorado en 2016, decidió buscar oportunidades en China junto con su amor chino.

La pareja eligió la provincia de Hainan, una isla tropical en el extremo sur de China, como la partida de su carrera en el país asiático. Entre las múltiples razones de su decisión, una de las más importantes fue que un profesor de la Universidad de Hainan le ofreció a Vásquez un puesto de postdoctorado.

"Envié aplicaciones a varias universidades chinas, la mayoría resultó en vano. Sin embargo, el profesor Wang Aimin de la Universidad de Hainan me respondió de inmediato y me admitió como postdoctorado en su laboratorio de la Facultad de Oceanografía", recordó Vásquez.

Boda de Vásquez y Tong celebrada el 5 de mayo de 2019, en la ciudad de Qionghai,en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua)

En aquel entonces, China y El Salvador todavía no habían establecido relaciones oficiales, por eso era muy complicado conseguir la visa de trabajo del país asiático.

"Había que sacar documentos entre El Salvador, China, las embajadas chinas en Japón y Costa Rica, y el proceso tardó casi ocho meses, pero el profesor Wang siempre me apoyaba y me guardaba la oportunidad", dijo.

En la Universidad de Hainan, el docente salvadoreño se dedicaba al cultivo de una nueva especie de ostra de perlas, orientado por el profesor Wang.

"Su experiencia profesional está en línea con nuestro laboratorio y la universidad tiene la política de introducir a talentos extranjeros, por eso lo admitimos. Es un estudiante dedicado y práctico, y su investigación ha obtenido varios logros innovadores", señaló el profesor Wang, quien está muy satisfecho del alumno salvadoreño.

Después de tres años de estudio, Vásquez pasó la prueba para conseguir la licencia de postdoctorado en junio de este año, convirtiéndose en el primer postdoctorado extranjero de la Universidad de Hainan.

"Agradezco mucho al profesor Wang, que me ayudó muchísimo tanto en el estudio como en la vida", expresó Vásquez.

Vásquez echa café para su esposa en su tostador el 11 de agosto de 2019 en la ciudad de Qionghai, en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua/Yang Guanyu)

Por su parte, Wang Aimin tiene puestas más esperanzas en Vásquez: "La universidad ha planeado contratarlo como profesor asistente. Considerando que la acuicultura es una industria popular en muchos países a lo largo de la Franja y la Ruta, espero que él pueda contribuir con sus ventajas lingüísticas y profesionales a la futura cooperación internacional de nuestro laboratorio".

A comienzos de 2018, Vásquez y Tong se registraron para casarse. Un año después, celebraron su boda en una playa hermosa de Hainan, con la participación de parientes y amigos de ambas familias.

En cuanto a los "choques" entre los dos debido a la gran diferencia en ámbitos culturales, tradicionales y de personalidad, la pareja los resuelve con comunicación y entendimiento.

"Tong es muy independiente, ella tiene la capacidad de decidir y siempre está dispuesta a intentar", asegura él.

"Vásquez es paciente, laborioso, sabe disfrutar del presente y presta más atención al proceso que al resultado", refiere ella.

Al hablar sobre el uno al otro, se observan luces de admiración en los ojos tanto de Vásquez como de Tong.

Vásquez y Tong paseando en la playa donde celebraron su boda el 11 de agosto de 2019. (Xinhua/Yang Guanyu)

El matrimonio también ha fomentado el conocimiento de sus familias sobre los dos países, a pesar de la lejanía.

"Al principio nadie de mi familia sabía de El Salvador, pero ahora todos lo conocen mucho, incluso mi abuela de 80 años recuerda bien el nombre del presidente salvadoreño", dijo Tong con orgullo.

Para la familia de Vásquez, China había sido un país misterioso. "Mi mamá creía que China era una selva, al venir acá encontró que es un país seguro, próspero y moderno", sonrió Vásquez.

El 21 de agosto de 2018, China y El Salvador establecieron sus relaciones diplomáticas, lo que animó a las familias de Vásquez y Tong.

"Casi todos nuestros familiares y amigos hablaron sobre esta noticia en su cuenta de las redes sociales. Y gracias a eso, obtuve más confianza de los padres de Tong, porque con la presencia diplomática de mi país en China, ellos saben dónde me buscan en caso de que me vaya", bromeó Vásquez.

"Esta noticia ha traído más esperanza a mi papá, ya que con el establecimiento de las relaciones se estrechará la cooperación bilateral y nuestras oportunidades aumentarán", dijo Tong.

Vásquez probando el café "primer aniversario" en su tostador el 11 de agosto de 2019 en la ciudad de Qionghai, en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua/Yang Guanyu)

En noviembre pasado, Tong viajó a El Salvador con sus padres, donde se fascinó con el café salvadoreño y decidió crear un negocio relacionado con el sector.

Tras regresar a China, abrió un tostador especializado en el café salvadoreño, y su esposo, un ingeniero bien experimentado, sirve de técnico para el tostado.

La tienda lleva el nombre de "Boquerón", el mismo de un volcán cercano al hogar de Vásquez, ya que la pareja desea dar a conocer más sobre el país latinoamericano entre los chinos.

Hasta el momento, el negocio del café de la pareja Vásquez arranca con buen paso, la contratación de trabajo con la Universidad de Hainan está en proceso y el amor trasnacional ha dado frutos dulces... Vásquez, un salvadoreño que vive en el extremo sur de China, nunca había pensado que pudiera tener tantos nexos con el gran país oriental.

"Al principio vine aquí para mi amor, ahora además de esta razón, estoy aquí por las vastas oportunidades y opciones en China. Algún día en el futuro, deseo llevar las experiencias de desarrollo de China a mi patria", aseguró Vásquez preparando una taza del café "primer aniversario".

 
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ESPECIAL: Un café con amor: La historia de un salvadoreño y su pasión por China

Spanish.xinhuanet.com 2019-08-20 18:31:54

Por Zhang Tuo, Zhang Yuanpei y Yang Guanyu

Vásquez y Tong eligiendo granos de café en su tostador el 11 de agosto de 2019 en la ciudad de Qionghai,en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua/Yang Guanyu)

HAIKOU, 20 ago (Xinhua) -- Una tarde de pleno verano, en un tostador de café ubicado en la ciudad de Qionghai, en la provincia meridional china de Hainan, el salvadoreño Hebert Vásquez y su esposa china Tong Taohui intentaban crear un nuevo sabor mediante la combinación de granos chinos y salvadoreños.

La pareja trasnacional denominó este café "primer aniversario", con motivo de la conmemoración del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y El Salvador el 21 de agosto del 2018, una fecha importante para ellos.

Vásquez, de 42 años, cursó un postdoctorado en pesquería y su investigación se centra en las ostras. Se enamoró de Tong en 2011, cuando los dos estudiaban en la misma universidad en Japón. Después de terminar el doctorado en 2016, decidió buscar oportunidades en China junto con su amor chino.

La pareja eligió la provincia de Hainan, una isla tropical en el extremo sur de China, como la partida de su carrera en el país asiático. Entre las múltiples razones de su decisión, una de las más importantes fue que un profesor de la Universidad de Hainan le ofreció a Vásquez un puesto de postdoctorado.

"Envié aplicaciones a varias universidades chinas, la mayoría resultó en vano. Sin embargo, el profesor Wang Aimin de la Universidad de Hainan me respondió de inmediato y me admitió como postdoctorado en su laboratorio de la Facultad de Oceanografía", recordó Vásquez.

Boda de Vásquez y Tong celebrada el 5 de mayo de 2019, en la ciudad de Qionghai,en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua)

En aquel entonces, China y El Salvador todavía no habían establecido relaciones oficiales, por eso era muy complicado conseguir la visa de trabajo del país asiático.

"Había que sacar documentos entre El Salvador, China, las embajadas chinas en Japón y Costa Rica, y el proceso tardó casi ocho meses, pero el profesor Wang siempre me apoyaba y me guardaba la oportunidad", dijo.

En la Universidad de Hainan, el docente salvadoreño se dedicaba al cultivo de una nueva especie de ostra de perlas, orientado por el profesor Wang.

"Su experiencia profesional está en línea con nuestro laboratorio y la universidad tiene la política de introducir a talentos extranjeros, por eso lo admitimos. Es un estudiante dedicado y práctico, y su investigación ha obtenido varios logros innovadores", señaló el profesor Wang, quien está muy satisfecho del alumno salvadoreño.

Después de tres años de estudio, Vásquez pasó la prueba para conseguir la licencia de postdoctorado en junio de este año, convirtiéndose en el primer postdoctorado extranjero de la Universidad de Hainan.

"Agradezco mucho al profesor Wang, que me ayudó muchísimo tanto en el estudio como en la vida", expresó Vásquez.

Vásquez echa café para su esposa en su tostador el 11 de agosto de 2019 en la ciudad de Qionghai, en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua/Yang Guanyu)

Por su parte, Wang Aimin tiene puestas más esperanzas en Vásquez: "La universidad ha planeado contratarlo como profesor asistente. Considerando que la acuicultura es una industria popular en muchos países a lo largo de la Franja y la Ruta, espero que él pueda contribuir con sus ventajas lingüísticas y profesionales a la futura cooperación internacional de nuestro laboratorio".

A comienzos de 2018, Vásquez y Tong se registraron para casarse. Un año después, celebraron su boda en una playa hermosa de Hainan, con la participación de parientes y amigos de ambas familias.

En cuanto a los "choques" entre los dos debido a la gran diferencia en ámbitos culturales, tradicionales y de personalidad, la pareja los resuelve con comunicación y entendimiento.

"Tong es muy independiente, ella tiene la capacidad de decidir y siempre está dispuesta a intentar", asegura él.

"Vásquez es paciente, laborioso, sabe disfrutar del presente y presta más atención al proceso que al resultado", refiere ella.

Al hablar sobre el uno al otro, se observan luces de admiración en los ojos tanto de Vásquez como de Tong.

Vásquez y Tong paseando en la playa donde celebraron su boda el 11 de agosto de 2019. (Xinhua/Yang Guanyu)

El matrimonio también ha fomentado el conocimiento de sus familias sobre los dos países, a pesar de la lejanía.

"Al principio nadie de mi familia sabía de El Salvador, pero ahora todos lo conocen mucho, incluso mi abuela de 80 años recuerda bien el nombre del presidente salvadoreño", dijo Tong con orgullo.

Para la familia de Vásquez, China había sido un país misterioso. "Mi mamá creía que China era una selva, al venir acá encontró que es un país seguro, próspero y moderno", sonrió Vásquez.

El 21 de agosto de 2018, China y El Salvador establecieron sus relaciones diplomáticas, lo que animó a las familias de Vásquez y Tong.

"Casi todos nuestros familiares y amigos hablaron sobre esta noticia en su cuenta de las redes sociales. Y gracias a eso, obtuve más confianza de los padres de Tong, porque con la presencia diplomática de mi país en China, ellos saben dónde me buscan en caso de que me vaya", bromeó Vásquez.

"Esta noticia ha traído más esperanza a mi papá, ya que con el establecimiento de las relaciones se estrechará la cooperación bilateral y nuestras oportunidades aumentarán", dijo Tong.

Vásquez probando el café "primer aniversario" en su tostador el 11 de agosto de 2019 en la ciudad de Qionghai, en la provincia meridional china de Hainan. (Xinhua/Yang Guanyu)

En noviembre pasado, Tong viajó a El Salvador con sus padres, donde se fascinó con el café salvadoreño y decidió crear un negocio relacionado con el sector.

Tras regresar a China, abrió un tostador especializado en el café salvadoreño, y su esposo, un ingeniero bien experimentado, sirve de técnico para el tostado.

La tienda lleva el nombre de "Boquerón", el mismo de un volcán cercano al hogar de Vásquez, ya que la pareja desea dar a conocer más sobre el país latinoamericano entre los chinos.

Hasta el momento, el negocio del café de la pareja Vásquez arranca con buen paso, la contratación de trabajo con la Universidad de Hainan está en proceso y el amor trasnacional ha dado frutos dulces... Vásquez, un salvadoreño que vive en el extremo sur de China, nunca había pensado que pudiera tener tantos nexos con el gran país oriental.

"Al principio vine aquí para mi amor, ahora además de esta razón, estoy aquí por las vastas oportunidades y opciones en China. Algún día en el futuro, deseo llevar las experiencias de desarrollo de China a mi patria", aseguró Vásquez preparando una taza del café "primer aniversario".

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