ESPECIAL: Proyecto educativo de Panamá conecta aulas con la ciencia

Actualizado 2019-08-09 05:31:54 | Spanish. xinhuanet. com

Por Luis Alberto Sierra G.

PANAMA-BARRO COLORADO-PROYECTO EDUCATIVO

Imagen del 7 de agosto de 2019, de la científica Jacalyn Giacalone Willis analizando fotografías tomadas por cámaras trampa, en su laboratorio en el Centro de Investigaciones del Smithsonian de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

PANAMA, 8 ago (Xinhua) -- Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños.

El método, que utiliza las tecnologías de la información y comunicación (TIC), contempla la implementación de nuevos recursos tecnológicos, como videoconferencias para darle mayor dinámica a la experiencia, y cuenta como escenario base la selvática isla de Barro Colorado, localizada en el lago Gatún del Canal de Panamá, próximo a cumplir 105 años.

En dicha estación biológica, creada en 1923 y custodiada por el estadounidense Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI, por sus siglas en inglés), hospeda cada febrero y agosto a miembros de Profesional Resources In Science and Math (Prism), a cargo de la doctora Willis, para llevar a cabo el proyecto educativo Conexión del Bosque Tropical.

El equipo, liderado por Prism, tiene instaladas dos cámaras trampa en la provincia de Chiriquí (oeste), y 27 en diferentes partes de Barro Colorado para captar imágenes y datos del comportamiento de depredadores y presas, así como del crecimiento y salud de plantas y árboles, para avanzar en sus investigaciones y, sobre todo, compartir con los jóvenes.

Según los responsables, el proyecto no sólo ha beneficiado a los panameños, sino también a estudiantes de otras partes del mundo como Costa Rica, Tailandia, Australia, Honduras, Nueva Zelanda, Australia, Belice y Kenia.

Los medios fueron testigos de una conexión digital entre el grupo dirigido por Willis y un colegio público panameño, que tuvo como fondo el sonido de monos aulladores y demás especies, como aves que estaban a apenas unos metros de distancia.

Durante la sesión, los menores hicieron preguntas a los expertos, como el número de especies de mapaches que hay en Panamá, o referentes al comportamiento de los animales.

Willis recordó, en entrevista con Xinhua, que el proyecto empezó con escuelas de Estados Unidos, por la mayor disponibilidad de acceso Internet, pero en 2007 empezaron a trabajar con algunas escuelas privadas panameñas en las que se hablaba más inglés y, a medida que el Internet se popularizó, se extendió a las escuelas públicas con el español como idioma principal.

En ese sentido, la científica reconoció que la conexión a Internet fue un factor que en ocasiones dificultó que el proyecto se extendiera más, sumado al hecho de las escuelas panameñas tienen vacaciones de enero a marzo, periodo en el que se realiza la mayor parte del proyecto en el bosque panameño.

Willis destacó que actualmente algunas escuelas han conseguido fondos para obtener la tecnología necesaria y poder participar en el proyecto, por lo que recientemente se han podido conectar con dos colegios públicos, y ya tienen previsto conectarse con otra.

Asimismo, la científica expuso que ahora tiene la misión de llegar a 50 ó 100 escuelas más, pero para ello están buscando fondos para ayudar a los científicos panameños, y conseguir equipos con lo necesario para conectarse para distribuir en las escuelas.

La pionera subrayó que los jaguares y tapires siguen siendo cazados pese a que viven en parques nacionales protegidos, por lo que es relevante que los educandos puedan conocer y entender más sobre los ecosistemas.

"Animales tan importantes como el jaguar siguen desapareciendo y han desaparecido de la zona central de Panamá, y entonces es importante que los niños, como personas del futuro que van a tomas decisiones, puedan entender que la pérdida del medio ambiente y la cacería son las dos razones más importantes por las cuales muchas de estas especies están desapareciendo", dijo.

Willis expuso que se estima hay unas 28 especies de mamíferos en Barro Colorado, aproximadamente 74 especies de murciélagos, y otras especies más que pasan por el lugar pero que no se quedan en el área tropical.

De acuerdo con información exhibida en la estación de la isla, en Panamá, al igual que en costas del Atlántico y el Pacífico, se estima que hay más de 1.500 especies de mariposas, 1.002 de aves, 214 de anfibios, 248 de reptiles, 1.400 de peces, 264 de mamíferos, más de 50.000 especies de hongos y más de 10.000 de plantas.

Por su parte, Claudio Monteza, estudiante de doctorado de la Universidad de California en Davis e investigador visitante del STRI, explicó que este año se retomó el proyecto como piloto con escuelas panameñas, con el propósito de ampliarlo en un futuro al resto del país, incluyendo escuelas de difícil acceso.

Destacó que en las conexiones es posible mostrarle en vivo a los estudiantes el comportamiento de los animales, incluso si pasa un barco por el bosque, ya que están a orillas del Canal de Panamá.

"Permite a estudiantes de diferentes disciplinas de las ciencias adquirir esa experiencia de campo que no pueden adquirir en un salón de aulas", dijo.

"Es un sitio donde podemos tener estudiantes de diferentes nacionalidades aprendiendo sobre ciencias, pero desde perspectivas diferentes", agregó.

El educador José Sánchez, cuyos estudiantes del Colegio Brader y del Instituto Atenea de Panamá participaron hace años en las videoconferencias, destacó que la experiencia significó una ventaja logística al no tener que desplazar para acceder a este conocimiento.

"El programa ayudó para que los alumnos puedan preguntarle a los científicos sobre lo que han aprendido en teoría en los salones", comentó.

Los científicos anunciaron que se trabaja en un convenio que permita expandir la conexión del bosque tropical a la recién creada reserva biológica Dr. Rodrigo Tarté, en la capital panameña, con el apoyo de Prism y de la empresa J&J Strategic Communication.

PANAMA-BARRO COLORADO-PROYECTO EDUCATIVO

Imagen del 7 de agosto de 2019 de un mono aullador saltando desde un árbol en los alrededores del Centro de Investigaciones del Smithsonian de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

PANAMA-BARRO COLORADO-PROYECTO EDUCATIVO

Imagen del 7 de agosto de 2019, de Claudio Monteza, estudiante de doctorado, realizando un recorrido para colocar cámaras trampa en un sendero de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

PANAMA-BARRO COLORADO-PROYECTO EDUCATIVO

Imagen del 7 de agosto de 2019, de Claudio Monteza, estudiante de doctorado, realizando un recorrido para colocar cámaras trampa en un sendero de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

PANAMA-BARRO COLORADO-PROYECTO EDUCATIVO

Imagen del 7 de agosto de 2019, de un mono aullador escalando un árbol en los alrededores del Centro de Investigaciones del Smithsonian de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

 
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ESPECIAL: Proyecto educativo de Panamá conecta aulas con la ciencia

Spanish.xinhuanet.com 2019-08-09 05:31:54

Por Luis Alberto Sierra G.

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Imagen del 7 de agosto de 2019, de la científica Jacalyn Giacalone Willis analizando fotografías tomadas por cámaras trampa, en su laboratorio en el Centro de Investigaciones del Smithsonian de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

PANAMA, 8 ago (Xinhua) -- Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños.

El método, que utiliza las tecnologías de la información y comunicación (TIC), contempla la implementación de nuevos recursos tecnológicos, como videoconferencias para darle mayor dinámica a la experiencia, y cuenta como escenario base la selvática isla de Barro Colorado, localizada en el lago Gatún del Canal de Panamá, próximo a cumplir 105 años.

En dicha estación biológica, creada en 1923 y custodiada por el estadounidense Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI, por sus siglas en inglés), hospeda cada febrero y agosto a miembros de Profesional Resources In Science and Math (Prism), a cargo de la doctora Willis, para llevar a cabo el proyecto educativo Conexión del Bosque Tropical.

El equipo, liderado por Prism, tiene instaladas dos cámaras trampa en la provincia de Chiriquí (oeste), y 27 en diferentes partes de Barro Colorado para captar imágenes y datos del comportamiento de depredadores y presas, así como del crecimiento y salud de plantas y árboles, para avanzar en sus investigaciones y, sobre todo, compartir con los jóvenes.

Según los responsables, el proyecto no sólo ha beneficiado a los panameños, sino también a estudiantes de otras partes del mundo como Costa Rica, Tailandia, Australia, Honduras, Nueva Zelanda, Australia, Belice y Kenia.

Los medios fueron testigos de una conexión digital entre el grupo dirigido por Willis y un colegio público panameño, que tuvo como fondo el sonido de monos aulladores y demás especies, como aves que estaban a apenas unos metros de distancia.

Durante la sesión, los menores hicieron preguntas a los expertos, como el número de especies de mapaches que hay en Panamá, o referentes al comportamiento de los animales.

Willis recordó, en entrevista con Xinhua, que el proyecto empezó con escuelas de Estados Unidos, por la mayor disponibilidad de acceso Internet, pero en 2007 empezaron a trabajar con algunas escuelas privadas panameñas en las que se hablaba más inglés y, a medida que el Internet se popularizó, se extendió a las escuelas públicas con el español como idioma principal.

En ese sentido, la científica reconoció que la conexión a Internet fue un factor que en ocasiones dificultó que el proyecto se extendiera más, sumado al hecho de las escuelas panameñas tienen vacaciones de enero a marzo, periodo en el que se realiza la mayor parte del proyecto en el bosque panameño.

Willis destacó que actualmente algunas escuelas han conseguido fondos para obtener la tecnología necesaria y poder participar en el proyecto, por lo que recientemente se han podido conectar con dos colegios públicos, y ya tienen previsto conectarse con otra.

Asimismo, la científica expuso que ahora tiene la misión de llegar a 50 ó 100 escuelas más, pero para ello están buscando fondos para ayudar a los científicos panameños, y conseguir equipos con lo necesario para conectarse para distribuir en las escuelas.

La pionera subrayó que los jaguares y tapires siguen siendo cazados pese a que viven en parques nacionales protegidos, por lo que es relevante que los educandos puedan conocer y entender más sobre los ecosistemas.

"Animales tan importantes como el jaguar siguen desapareciendo y han desaparecido de la zona central de Panamá, y entonces es importante que los niños, como personas del futuro que van a tomas decisiones, puedan entender que la pérdida del medio ambiente y la cacería son las dos razones más importantes por las cuales muchas de estas especies están desapareciendo", dijo.

Willis expuso que se estima hay unas 28 especies de mamíferos en Barro Colorado, aproximadamente 74 especies de murciélagos, y otras especies más que pasan por el lugar pero que no se quedan en el área tropical.

De acuerdo con información exhibida en la estación de la isla, en Panamá, al igual que en costas del Atlántico y el Pacífico, se estima que hay más de 1.500 especies de mariposas, 1.002 de aves, 214 de anfibios, 248 de reptiles, 1.400 de peces, 264 de mamíferos, más de 50.000 especies de hongos y más de 10.000 de plantas.

Por su parte, Claudio Monteza, estudiante de doctorado de la Universidad de California en Davis e investigador visitante del STRI, explicó que este año se retomó el proyecto como piloto con escuelas panameñas, con el propósito de ampliarlo en un futuro al resto del país, incluyendo escuelas de difícil acceso.

Destacó que en las conexiones es posible mostrarle en vivo a los estudiantes el comportamiento de los animales, incluso si pasa un barco por el bosque, ya que están a orillas del Canal de Panamá.

"Permite a estudiantes de diferentes disciplinas de las ciencias adquirir esa experiencia de campo que no pueden adquirir en un salón de aulas", dijo.

"Es un sitio donde podemos tener estudiantes de diferentes nacionalidades aprendiendo sobre ciencias, pero desde perspectivas diferentes", agregó.

El educador José Sánchez, cuyos estudiantes del Colegio Brader y del Instituto Atenea de Panamá participaron hace años en las videoconferencias, destacó que la experiencia significó una ventaja logística al no tener que desplazar para acceder a este conocimiento.

"El programa ayudó para que los alumnos puedan preguntarle a los científicos sobre lo que han aprendido en teoría en los salones", comentó.

Los científicos anunciaron que se trabaja en un convenio que permita expandir la conexión del bosque tropical a la recién creada reserva biológica Dr. Rodrigo Tarté, en la capital panameña, con el apoyo de Prism y de la empresa J&J Strategic Communication.

PANAMA-BARRO COLORADO-PROYECTO EDUCATIVO

Imagen del 7 de agosto de 2019 de un mono aullador saltando desde un árbol en los alrededores del Centro de Investigaciones del Smithsonian de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

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Imagen del 7 de agosto de 2019, de Claudio Monteza, estudiante de doctorado, realizando un recorrido para colocar cámaras trampa en un sendero de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

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Imagen del 7 de agosto de 2019, de Claudio Monteza, estudiante de doctorado, realizando un recorrido para colocar cámaras trampa en un sendero de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

PANAMA-BARRO COLORADO-PROYECTO EDUCATIVO

Imagen del 7 de agosto de 2019, de un mono aullador escalando un árbol en los alrededores del Centro de Investigaciones del Smithsonian de la isla de Barro Colorado, en el lago Gatún del Canal de Panamá, Panamá. Un proyecto creado hace más de 16 años en Panamá por los científicos estadounidense Jacalyn Giacalone Willis y su esposo Gregory Willis, que conecta a través de videoconferencias a científicos con estudiantes en las aulas, está tomando un nuevo impulso para generar mayor conciencia ambiental en los estudiantes panameños. (Xinhua/Mauricio Valenzuela)

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