LA HABANA, 27 jun (Xinhua) -- Más de 2,7 millones de cubanos se beneficiarán con la reciente decisión del gobierno de aprobar un incremento salarial en el sector presupuestado y también de las pensiones, como parte de un grupo de medidas para impulsar la economía, anunció este jueves la televisión local.
De acuerdo con la nota oficial difundida en el noticiero nocturno, en una reunión del Consejo de Ministros, el titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández, informó que el aumento de los sueldos se aplicará a partir del mes de julio entrante y comprende a casi un millón y medio de trabajadores, con un costo anual de 7.050 millones de pesos (igual en dólares al cambio oficial).
El salario mínimo, precisó, se incrementará a 400 pesos y el salario medio mensual por trabajador se elevará a 1.067, superior en 196 pesos al reportado al cierre del pasado año (871).
Sobre el tema, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel expresó en la reunión que "no es el incremento salarial final al que vamos, pero es bastante significativo para las condiciones en las que estamos".
En el caso de la Seguridad Social, los más de 1,2 millón de jubilados que no recibieron aumentos en noviembre de 2018 cuando se aumentó la pensión mínima y en la actualidad reciben menos de 500 pesos, ahora se favorecen con las nuevas medidas, con un costo estimado anual de 700 millones de pesos.
Paralelo al incremento de los salarios y las pensiones, el gobierno determinó generalizar la aplicación de la Contribución Especial a la Seguridad Social a los trabajadores estatales, y quienes obtengan ingresos mensuales hasta 500 pesos aportarán el 2,5 por ciento, y aquellos que reciban salarios superiores a esa cifra contribuirán con el 5 por ciento.
Acerca del sector empresarial, el Consejo de Ministros aprobó perfeccionar el mecanismo para el pago del salario mediante la vinculación con los resultados productivos, lo cual se implementará a partir de 2020.
Díaz-Canel aseveró que el objetivo es "estimular al que trabaje y aporte más".
El mandatario enfatizó que la intención del grupo de medidas es potenciar el desarrollo del país y hacer frente a la compleja situación de los momentos actuales, pero puntualizó que "todas no se pondrán en marcha de inmediato, pues precisan de más análisis y trabajo".
Según el reporte, en los próximos días los medios locales informarán de manera más detallada sobre el alcance de estas decisiones.
La insuficiencia de las remuneraciones de los trabajadores frente a los elevados precios de los productos básicos en el mercado minorista es un tema recurrente en el sector laboral y la población en general.
Expertos cubanos atribuyen a los bajos salarios problemas que enfrenta la economía interna como la fluctuación de trabajadores de alta calificación hacia sectores emergentes y no estatales, desmotivaciones y apatías laborales.
Cuba tiene como asignatura pendiente, y sin fecha aún, la eliminación de la dualidad monetaria y cambiaria que existe en la nación caribeña a pesar de la decisión oficial de terminarla.
La dualidad monetaria en la isla surgió en 1994, en el punto peor de la crisis económica nacional tras la desaparición de la Unión Soviética, al comenzar a circular, a la par del peso cubano (CUP), el peso "convertible" CUC, medida motivada por la fuerte depreciación de la moneda nacional y la autorización de la circulación del dólar de Estados Unidos en 1993.
Las tres monedas circularon hasta octubre de 2004, cuando el entonces presidente Fidel Castro (1926-2016) reaccionó a nuevas sanciones de Washington al amparo del bloqueo económico impuesto a La Habana desde 1962, y sacó el dólar de circulación.
Para las autoridades, la unificación monetaria constituye el proceso "más determinante" para avanzar en la reforma del modelo económico cubano, por el impacto que tendrá en todas las esferas del quehacer económico y social de la nación.