CARACAS, 1 may (Xinhua) -- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, responsabilizó hoy al asesor de seguridad de Estados Unidos, John Bolton, de dirigir el intento de golpe de Estado efectuado en su contra el martes.
"Este golpe de Estado que se pretendió ayer, esta escaramuza golpista, la dirigió personalmente desde la Casa Blanca, John Bolton, así lo denuncio y pido que se investiguen en los Estados Unidos las acciones ilegales y golpistas de John Bolton contra la democracia venezolana", declaró el mandatario.
Maduro hizo estas declaraciones tras recibir a una movilización por el Día Internacional de los Trabajadores en el Palacio de Miraflores en Caracas.
Mencionó que el golpe, "dirigido y preparado desde Washington", se planificó con base en "la intriga, el engaño, la mentira".
En referencia a las declaraciones del enviado de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, sobre las supuestas negociaciones con altos funcionarios para derrocarlo, Nicolás Maduro dijo que era "su esperanza", porque el gobierno estadounidense fue engañado por quienes lideraron el alzamiento.
"Los golpistas venezolanos no sólo se engañaron así mismos, no sólo engañaron al personal que movilizaron a Altamiras (en el este de Caracas), sino que los golpistas venezolanos, en esta oportunidad, engañaron al imperialismo norteamericano", sostuvo.
El presidente indicó que la estrategia era hacer creer que él renunciaría; sin embargo, dejó claro que para llegar a Miraflores (casa de gobierno) hay que ganar elecciones populares.
Maduro denunció que la derecha venezolana quiere dividir a la corriente chavista para presionar la entrega del poder.
El mandatario anunció que en los próximos días mostrará pruebas de las conspiraciones, y llamó a la justicia a hacer su parte.
Un grupo de militares encabezados por los opositores Juan Guaidó (diputado de la Asamblea Nacional en desacato) y Leopoldo López (integrante del partido Voluntad Popular) se apostaron el martes en el Distribuidor Altamira, una de las principales vías capitalinas, para pedir la salida del presidente Maduro.
La acción se disolvió la tarde del martes con el ingreso de Leopoldo López a la embajada de Chile, quien posteriormente pidió asilo en la sede diplomática española en Caracas.
Leopoldo López se encontraba cumpliendo una condena por los hechos violentos de 2014, que dejaron más de 40 fallecidos.
El presidente Maduro celebró la "victoria" sobre el intento de golpe de Estado, y agradeció al pueblo que salió a las calles en defensa de la constitucionalidad.
Agregó que la unión cívico-militar jamás permitirá que en Venezuela se concrete un golpe de Estado.