Imagen del 17 de abril de 2019 del interior del Convento de Santo Domingo, en Quito, capital de Ecuador. Un grupo de 10 expertos en restauración emprendió en Ecuador la titánica tarea de rescatar unos 33.000 libros de la época colonial con gran riqueza patrimonial, 26 de los cuales son incunables, es decir, fueron impresos en el siglo XV. La complicada tarea debido a la técnica que demanda se realiza en la biblioteca Fray Ignacio de Quezada del Convento de Santo Domingo, situado en el centro histórico de Quito. (Xinhua/Santiago Armas)
QUITO, 26 abr (Xinhua) -- Un grupo de 10 expertos en restauración emprendió en Ecuador la titánica tarea de rescatar unos 33.000 libros de la época colonial con gran riqueza patrimonial, 26 de los cuales son incunables, es decir, fueron impresos en el siglo XV.
La complicada tarea debido a la técnica que demanda se realiza en la biblioteca Fray Ignacio de Quezada del Convento de Santo Domingo, situado en el centro histórico de Quito.
El proyecto está a cargo de la Fundación Conservartecuador de Ecuador, con apoyo de la Fundación Príncipe Claus de Holanda y la Fundación Whiting de Estados Unidos, que proporcionan ayuda financiera para la conservación del patrimonio cultural de la humanidad.
El responsable del proyecto, Ramiro Endara, dijo a Xinhua que el objetivo es frenar el deterioro de estos libros de gruesas y añejas pastas, así como de frágiles y amarillentas páginas.
El deterioro es por el paso del tiempo y circunstancias como humedad, polvo, hongos y microorganismos, por lo que se trata de un proyecto "emergente" en favor de una colección documental.
"Es una biblioteca conventual única considerada una reliquia a nivel del Patrimonio de la Humanidad", expuso Endara.
"Esta biblioteca posee y atesora la mayor cantidad de libros coloniales de Sudamérica, con mayor número de libros incunables del Ecuador", detalló.
Por esa razón "es una colección "muy valiosa", además de que por su antigüedad y rareza se nombran "bienes documentales únicos en el mundo".
En la biblioteca se encuentran libros de historia, filosofía, teología, cánticos corales, poesía, partituras y obras de jurisprudencia de los siglos XV, XVI y XVII.
Cuenta con además manuscritos trazados por copistas, que según expertos podrían costar millones de dólares, por lo que fueron colocados en una caja fuerte.
Pero el libro que más llama la atención es una biblia políglota de 1640 escrita en siete idiomas: sirio, árabe, hebreo, latín, caldeo, griego y samaritano.
Para el bibliotecario Angel Oleas, especializado en libros antiguos, se trata de una de las biblias más importantes del mundo, cuyos contenidos grabados con la técnica de "aguafuerte" están intactos.
El texto pesa 40 kilos y está encuadernado en madera con hojas de papel de trapo.
Oleas dijo a Xinhua que los 33.000 libros que están en proceso de conservación van desde 1482 hasta inicios del siglo XX.
El especialista dijo que es una "colección variada" a pesar de tratarse de una biblioteca conventual direccionada a la formación de los sacerdotes dominicos.
"La variedad temática que tiene esta biblioteca es increíble. Se pueden encontrar muchas curiosidades bibliográficas que no hay en ninguna parte de América y que son muy extrañas en Europa", dijo.
El proceso técnico de limpieza y conservación de esta reliquia durará tres meses y es supervisado por el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural y el Ministerio de Cultura de Ecuador.
El equipo de expertos realizó de manera previa un levantamiento topográfico de la organización de las estanterías para registrar y codificar cada una de las colecciones.
Una primera intervención de la biblioteca se realizó en la década de los años 90.