URUMQI, 12 feb (Xinhua) -- La región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, generó vacantes para 75.000 residentes pobres en sus regiones meridionales en 2018, informaron las autoridades locales.
La creación de empleos es parte de un plan trienal de alivio de la pobreza que se enfoca en cuatro regiones meridionales de Xinjiang, Aksu, Kashgar, Hotan y la prefectura autónoma kirguís de Kizilsu, zonas que se encuentran entre las áreas más pobres en China.
Gracias a una serie de programas de creación de empleos que se puso en marcha el año pasado, los residentes con pocos recursos de dichas zonas pueden encontrar vacantes en parques industriales cercanos y fábricas o migrar a ciudades más grande de dentro o fuera de Xinjiang, según el departamento regional de recursos humanos y seguridad.
Las autoridades y compañías locales, con el objetivo de proporcionar a estas personas una mejor cualificación, han puesto en marcha cursos de formación de habilidades básicas para aquellos que están buscando trabajo.
Ahmat Abdullat era un campesino pobre en la aldea de Tetir, perteneciente a Kashgar, donde se ganaba la vida plantando y vendiendo nueces, junto con algún trabajo provisional de vez en cuando.
Abdullat participó en un curso de formación celebrado por una empresa de textiles y ropa con sede en Shanghai a principios del año pasado. En la actualidad es supervisor de seguridad de un taller de esta compañía y gana cerca de 2.500 yuanes (casi 368 dólares) mensuales.
"Este trabajo ha ayudado a que mi familia salga de la pobreza", aseveró.
Xinjiang, que es hogar de decenas de grupos étnicos, supone una sexta parte del territorio de China.
La creación de trabajos ha sido una prioridad de primer nivel para los funcionarios de Xinjiang en la lucha contra la pobreza. Las estadísticas oficiales mostraron que la región autónoma ha ayudado a 537.000 personas a mejorar sus condiciones de vida en 2018.
