BUDAPEST, 5 feb (Xinhua) -- El Gobierno húngaro se rehusó a apoyar un acuerdo de migración entre la Unión Europea (UE) y la Liga Arabe (LA), declararon hoy funcionarios.
"Hungría tiene tolerancia cero hacia la migración, y jamás respaldaremos cualquier documento que use el pacto mundial sobre migración de la ONU como un punto de referencia", dijo el ministro de Relaciones Exteriores y Comercio, Peter Szijjarto, citado en el sitio oficial del Gobierno húngaro.
Szijjarto respondió a las informaciones recientes de varios portales de noticias húngaros y extranjeros, que citan a una fuente diplomática de la UE, quien señaló que el Gobierno húngaro ha rechazado todas las ofertas de la Unión Europea de un compromiso sobre una postura conjunta respecto a la migración y que se ha aislado dentro del bloque.
Las fuentes diplomáticas de la UE acusan al Gobierno húngaro de hipocresía, pues el acuerdo con la Liga Arabe pretendía detener la migración ilegal desde Africa del Norte y Medio Oriente hacia Europa.
Pero el acuerdo hace una referencia al pacto mundial sobre migración de la ONU, que Hungría rechazó a mediados de 2018, tal como rechazó el pacto mundial de los refugiados de la ONU en diciembre de 2018. El Gobierno húngaro argumentó que los pactos de la ONU "fomentan el surgimiento de nuevos y peligrosos flujos de migración".
"Los políticos a favor de la migración siguen desbocados", subrayó Szijjarto. "Cada documento de la UE tratará de referirse al pacto mundial sobre la migración de la ONU a pesar del hecho de que nueve países miembros de la UE no votaron a favor de él", añadió.
El Gobierno húngaro jamás apoyará el pacto que, indica, desea facilitar la inmigración. "Un documento sobre el que no existe un acuerdo unánime entre todos los países miembros no puede ser un punto de referencia", enfatizó.
El ministro añadió que el aislamiento de Hungría "ha sido durante mucho tiempo una quimera para quienes apoyan la migración". "Cualquiera que diga no a la migración continuará siendo nuestro aliado", concluyó.
La crisis de migración de 2015 desencadenó grandes cambios en la política europea y propició el aumento de los movimientos y gobiernos nacionalistas, que desean cerrar sus fronteras a la gente que se traslada desde Medio Oriente y Africa del Norte.
Más de un millón de personas cruzaron el mar en 2015, pero el número cayó fuertemente a menos de 140.000 en 2018, de acuerdo con las cifras de la ONU.
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, declaró el mes pasado que las divisiones en el bloque de 28 naciones son ahora respecto a la migración y no por divisiones izquierda-derecha.
Una coalición de gobiernos que se opone a la migración y que incluye a Hungría, Italia, Polonia y hasta Austria ha dificultado que el bloque tenga una postura unificada al respecto.
Los ministros de la UE y de la Liga Arabe prepararon el lunes una cumbre en la ciudad turística egipcia de Sharm el-Sheikh para el 24 y 25 de febrero. Será la primera reunión de su tipo.
