ESPECIAL: La magia de los colibríes se encuentra en Colombia

Spanish.xinhuanet.com   2019-01-10 15:45:53

Por Sylvia B. Zárate y César Mariño

BOGOTA, 9 ene (Xinhua) -- Entre los mayas estas aves eran las mensajeras de los buenos pensamientos de los hombres, los aztecas las asociaban con el poder, el vigor y la agilidad del guerrero y en toda Suramérica eran consideradas hijas del sol.

Destacados en el planeta por poseer en su amplia familia al ave más pequeña del mundo, con sólo cinco centímetros de longitud, los colibríes se han ganado un lugar en el imaginario humano por las características únicas de su género.

Volar hacia atrás, ser las únicas aves polinizadoras del planeta y utilizar las alas como único medio de locomoción, ya que no pueden caminar, además de su iridiscente plumaje hacen que los observadores de aves tengan en el colibrí uno de sus principales sujetos de estudio.

Muy cerca de Bogotá, en el municipio de La Calera, en las estribaciones de la cordillera oriental colombiana, se encuentra el lugar para que profesionales y aficionados de esta actividad tengan un cercano contacto con 18 de las 343 especies de colibríes clasificadas por los especialistas en aves.

En entrevista con Xinhua, la directora del observatorio, Victoria Lizarralde, recordó que Colombia es el país número uno en aves y también el número uno en colibríes, estos animales coloridos que sólo se encuentran en el continente americano.

"Tenemos 165 especies de las 343 y seguramente habrá más por descubrir. En este lugar hay 18 especies registradas de las cuales 14 visitan permanentemente el jardín. La importancia de los colibríes va mucho más allá, yo siento que son animales mágicos, no son animales de esta dimensión, tienen una vibración diferente, llevan y traen mensajes", expresó.

El Observatorio de Colibríes lleva 14 años recibiendo a colombianos y extranjeros que llegan atraídos por la diversidad que en todo tipo de fauna tiene el país andino.

En su labor de "guardiana de los colibríes", como ella misma se denomina, Lizarralde ha encontrado uno de los motivos para concienciar a las personas sobre el valor de cada especie animal y la forma sobre cómo proteger específicamente a estas aves.

Aunque como especie los colibríes no aparecen aún entre los seres en riesgo de extinción, la desaparición de su hábitat debido a la depredación humana hace que cada día sean más vulnerables y su población disminuya drásticamente.

Mientras tanto en el observatorio los colibríes son alimentados en bebederos esterilizados permanentemente y tienen a su disposición un amplio jardín de sus flores más apetecidas para propender por su adecuada conservación.

"Cómo puedes tu entender que en un segundo un colibrí bata las alas entre 60 y 80 veces, avanzan 70 kilómetros por hora, tienen más aceleración que un jet, 23.5 metros por segundo", dijo Lizarralde.

Según la especialista, la iridiscencia de estas aves se debe al "efecto que tiene la luz del sol en su plumaje, eso lo tienen también los peces pero en los colibríes es absolutamente espectacular y de allí ese colorido que tienen".

Aunque son aptos para migrar, los colibríes colombianos no requieren hacerlo debido a la gran diversidad de alimento que ofrece su territorio. Por ello en cualquier piso térmico, desde el nivel del mar hasta superar los 3,000 metros de altura, se puede encontrar algún individuo de esta mística familia de aves.

Lugares como el Observatorio de Colibríes buscan educar a las personas en aspectos como el reemplazo de los cultivos sustentados con pesticidas y su reemplazo por prácticas que no menoscaben el hábitat de estos polinizadores.

"Creo que en lugares como estos las personas empiezan a adoptar conciencia sobre el tema y no es un asunto de unas pocas personas, es un tema de todos" opinó Lizarralde.

Agregó que los colibríes habitan todo el continente americano pero que es en la zona tropical donde se concentra la mayor cantidad de ellos por lo que Colombia tiene el privilegio de tenerlos dentro de su paisaje.

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ESPECIAL: La magia de los colibríes se encuentra en Colombia

Spanish.xinhuanet.com 2019-01-10 15:45:53

Por Sylvia B. Zárate y César Mariño

BOGOTA, 9 ene (Xinhua) -- Entre los mayas estas aves eran las mensajeras de los buenos pensamientos de los hombres, los aztecas las asociaban con el poder, el vigor y la agilidad del guerrero y en toda Suramérica eran consideradas hijas del sol.

Destacados en el planeta por poseer en su amplia familia al ave más pequeña del mundo, con sólo cinco centímetros de longitud, los colibríes se han ganado un lugar en el imaginario humano por las características únicas de su género.

Volar hacia atrás, ser las únicas aves polinizadoras del planeta y utilizar las alas como único medio de locomoción, ya que no pueden caminar, además de su iridiscente plumaje hacen que los observadores de aves tengan en el colibrí uno de sus principales sujetos de estudio.

Muy cerca de Bogotá, en el municipio de La Calera, en las estribaciones de la cordillera oriental colombiana, se encuentra el lugar para que profesionales y aficionados de esta actividad tengan un cercano contacto con 18 de las 343 especies de colibríes clasificadas por los especialistas en aves.

En entrevista con Xinhua, la directora del observatorio, Victoria Lizarralde, recordó que Colombia es el país número uno en aves y también el número uno en colibríes, estos animales coloridos que sólo se encuentran en el continente americano.

"Tenemos 165 especies de las 343 y seguramente habrá más por descubrir. En este lugar hay 18 especies registradas de las cuales 14 visitan permanentemente el jardín. La importancia de los colibríes va mucho más allá, yo siento que son animales mágicos, no son animales de esta dimensión, tienen una vibración diferente, llevan y traen mensajes", expresó.

El Observatorio de Colibríes lleva 14 años recibiendo a colombianos y extranjeros que llegan atraídos por la diversidad que en todo tipo de fauna tiene el país andino.

En su labor de "guardiana de los colibríes", como ella misma se denomina, Lizarralde ha encontrado uno de los motivos para concienciar a las personas sobre el valor de cada especie animal y la forma sobre cómo proteger específicamente a estas aves.

Aunque como especie los colibríes no aparecen aún entre los seres en riesgo de extinción, la desaparición de su hábitat debido a la depredación humana hace que cada día sean más vulnerables y su población disminuya drásticamente.

Mientras tanto en el observatorio los colibríes son alimentados en bebederos esterilizados permanentemente y tienen a su disposición un amplio jardín de sus flores más apetecidas para propender por su adecuada conservación.

"Cómo puedes tu entender que en un segundo un colibrí bata las alas entre 60 y 80 veces, avanzan 70 kilómetros por hora, tienen más aceleración que un jet, 23.5 metros por segundo", dijo Lizarralde.

Según la especialista, la iridiscencia de estas aves se debe al "efecto que tiene la luz del sol en su plumaje, eso lo tienen también los peces pero en los colibríes es absolutamente espectacular y de allí ese colorido que tienen".

Aunque son aptos para migrar, los colibríes colombianos no requieren hacerlo debido a la gran diversidad de alimento que ofrece su territorio. Por ello en cualquier piso térmico, desde el nivel del mar hasta superar los 3,000 metros de altura, se puede encontrar algún individuo de esta mística familia de aves.

Lugares como el Observatorio de Colibríes buscan educar a las personas en aspectos como el reemplazo de los cultivos sustentados con pesticidas y su reemplazo por prácticas que no menoscaben el hábitat de estos polinizadores.

"Creo que en lugares como estos las personas empiezan a adoptar conciencia sobre el tema y no es un asunto de unas pocas personas, es un tema de todos" opinó Lizarralde.

Agregó que los colibríes habitan todo el continente americano pero que es en la zona tropical donde se concentra la mayor cantidad de ellos por lo que Colombia tiene el privilegio de tenerlos dentro de su paisaje.

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