BUENOS AIRES, 30 nov (Xinhua) -- Los líderes que asisten en Buenos Aires, Argentina, a la Cumbre de Líderes del Grupo de los Veinte (G20) participaron la noche de hoy viernes en una gala en el emblemático Teatro Colón, donde presenciaron un espectáculo cultural y asistieron a una cena oficial.
El programa en el teatro, inaugurado en 1908, comenzó tras el arribo de líderes y sus cónyuges para una recepción y posteriormente una foto familiar, luego de lo cual los presentes ingresaron a la sala principal.
Allí disfrutaron de una función del espectáculo "Argentum", que contó con un gran despliegue tecnológico, 84 bailarines en escena, 75 músicos en vivo y artistas invitados.
Durante 40 minutos, "Argentum" propuso una experiencia que acercó toda la riqueza de los paisajes y climas, de la flora y la fauna, de los recursos naturales, de los productos de la tierra, de la mano del hombre, de la diversidad étnica, cultural y artística de cada una de las regiones argentinas.
La Patagonia (región sur) estuvo representada por bailarines que evocaron al tradicional gaucho y bailaron la danza conocida como "malambo".
La región de Cuyo (oeste) reconocida por sus altas cumbres, olivares y viñedos ofreció el jubiloso baile de la cueca, danza alegre con la que hombres y mujeres celebran la vendimia.
El rock sinfónico, con impronta industrial, el beatbox y el tango, se abrieron paso cuando fue el turno de recorrer el centro del país, con las pampas y las grandes ciudades.
Acto seguido, instrumentos de origen europeo armonizaron con el entorno natural del Litoral, ubicado en el este de Argentina, y una banda de acordeonistas desató la fiesta del chamamé, música que evoca el entorno de agua, cataratas, los ríos, los esteros y las islas, la selva, los hacheros y los pescadores.
El viaje llegó a su fin en el norte, donde se funden la historia y el futuro, la herencia precolombina y la tecnología minera, en un paisaje lleno de colores, de los cerros, los ponchos y los pueblos.
Los efectos electrónicos se sumaron a los sonidos autóctonos de los instrumentos sikus y charangos en una cumbia norteña, una chacarera y un carnavalito que cerró con orquesta, cantores y bailarines.
Al finalizar el espectáculo cultural, los líderes y sus acompañantes accedieron al Salón Dorado del teatro convertido en un espacio de conciertos de música de cámara, conferencias y exposiciones.
El menú incluyó platillos típicos argentinos y una selección de vinos de diferentes zonas vitivinícolas del país.