LA HABANA, noviembre 11, 2018 (Xinhua) -- Imagen del 2 de noviembre de 2018, de una persona observando mochilas equipadas con paneles solares flexibles que permiten cargar pequeños dispositivos portátiles, en el estand de la empresa china Beijing North Star, en el pabellón de China durante la 36 Feria Internacional de La Habana, en el recinto ferial de Expocuba, en La Habana, capital de Cuba. Cuba recibe un promedio de radiación solar de más de 1,800 kilowatts por metro cuadrado al año, lo que clasifica a la isla como una potencia energética a partir del uso de las fuentes renovables de energía (FRE), dicen los especialistas. Esa realidad es la que justifica la apuesta de la empresa china Beijing North Star por el mercado cubano, donde ahora se enfocan sobre todo en la comercialización de productos vinculados a las FRE. La empresa, que estuvo presente en la recién terminada 36 Feria Internacional de La Habana, mantiene una larga relación comercial con varias entidades gubernamentales cubanas, como los ministerios de Educación y de Salud Pública, a los que suministra productos que han tenido buena aceptación. (Xinhua/Joaquín Hernández)
Por Raúl Menchaca
LA HABANA, 11 nov (Xinhua) -- Cuba recibe un promedio de radiación solar de más de 1.800 kilowatts por metro cuadrado al año, lo que clasifica a la isla como una potencia energética a partir del uso de las fuentes renovables de energía (FRE), dicen los especialistas.
Esa realidad es la que justifica la apuesta de la empresa china Beijing North Star por el mercado cubano, donde ahora se enfocan sobre todo en la comercialización de productos vinculados a las FRE.
La empresa, que estuvo presente en la recién terminada 36 Feria Internacional de La Habana, mantiene una larga relación comercial con varias entidades gubernamentales cubanas, como los ministerios de Educación y de Salud Pública, a los que suministra productos que han tenido buena aceptación.
"Los productos electrónicos y de energía solar tienen mayor uso en Cuba, porque aquí hay mucho sol durante muchas horas, y por eso los productos que hacemos corresponden a lo que necesita este país", dijo a Xinhua la gerente general de la compañía, Yang Longchuan.
Una relación muy valiosa se mantiene con la industria electrónica cubana, a la que suministran piezas para ensamblar calentadores solares en una fábrica ubicada en la ciudad de Morón, en la central provincia de Ciego de Ávila, unos 450 kilómetros al este de La Habana.
También suministran todo lo necesario para ensamblar los tubos leds, desarrollados en China a partir del diseño de ingenieros cubanos para la iluminación de la red pública y de túneles.
"Se ha ejecutado un contrato y hay otro en marcha con muy buena aceptación de las luminarias para avenidas y almacenes", explicó la ingeniera cubana Iraya Rodríguez, quien es una de las vendedoras de la compañía.
Rodríguez, quien habla perfectamente en chino después de estudiar dos años en Beijing, señala que además ofrecen todas las piezas para montar en la isla cocinas de inducción, mientras los especialistas cubanos suministran las partes plásticas.
La empresa acaba de presentar en La Habana productos que son nuevos incluso en China, como mochilas que cuentan con un panel solar flexible que permite dar carga eléctrica a pequeños dispositivos portátiles mediante puertos USB.
También presentaron sombrillas de playa con celdas solares, que luego de cargadas tienen una autonomía de 10 horas y permiten también ofrecer energía a otros dispositivos.
"Apostamos por productos que son de energía renovable, como iluminación led, pequeños sistemas solares y baterías de litio que permiten usar un televisor o una nevera durante algunas horas", detalló la especialista que trabaja en la firma desde 2013.
Cuba, que vive un profundo proceso de reformas económicas, trata de disminuir la dependencia del petróleo mediante la ampliación del uso de las FRE que se espera constituyan en 2030 el 24 por ciento de la generación eléctrica del país.
La falta de petróleo obliga a la isla a realizar gravosas importaciones, "cuyo costo pende como espada de Damocles sobre nuestra economía", como recordó meses atrás el ahora ex presidente Raúl Castro, al abordar el tema en un discurso ante el Congreso.
En el programa gubernamental la energía fotovoltaica juega un papel decisivo, pues en la isla la radiación solar alcanza unos cinco kilowatts diarios por metro cuadrado, lo que significa 1.825 al año, un índice considerado como bueno por los expertos.
El gobierno planea la instalación de 59 parques fotovoltaicos en el país, que serán sincronizados al Sistema Electroenergético Nacional.
Esos proyectos permitirán a la isla depender menos del petróleo, pues en la actualidad tiene una producción del hidrocarburo y gas cercana a los cuatro millones de toneladas anuales, o sea unos 25 millones de barriles, de las cuales tres millones corresponden a un crudo pesado y el resto a gas natural.
Esa producción local cubre cerca de la mitad de las necesidades de la isla, que se completan con la compra de unos 100.000 barriles diarios a Venezuela.
Los planes gubernamentales han sido un nicho comercial bien aprovechado por Beijing North Star, una compañía china que acompaña los esfuerzos cubanos por sacar energía del sol.