TIANJIN, 21 sep (Xinhua) -- El Foro Davos de Verano que acaba de celebrarse en la ciudad china de Tianjin estuvo marcado por un sentido mucho más poderoso de construcción de una comunidad global, prueba de lo cual fueron el ánimo y la disposición de los participantes para intervenir en conversaciones transculturales, transindustriales y transregionales.
En un panel de discusión sobre el futuro de la inteligencia artificial, el fundador y presidente ejecutivo de Alibaba, Jack Ma, dijo que la cuarta revolución industiral afectará a todos los sectores a una velocidad cada vez más rápida y tendrá un mayor impacto en todas las personas y en todos los sectores.
Ma alabó a Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial (WEF, siglas en inglés) por dedicar tanto tiempo para hacer de este una "fiesta de ideas" para buscar y encontrar visiones sobre cómo está cambiando el mundo y sobre lo que será el futuro del mundo.
En la reunión, Schwab anunció que el WEF abrirá en China un Centro para la Cuarta Revolución Industrial y lo integrerá en su oficina representativa en Beijing para promover la cooperación tecnológica global.
Luego de 11 años desde su establecimiento por parte del WEF, la influencia del Foro Davos de Verano no ha parado de crecer. En esta ocasión, entre el martes y el jueves, una cifra récord de más de 2.000 de los más destacados empresarios, académicos y funcionarios a nivel mundial, asistieron al evento de Tianjin, y deliberaron sobre varios de los asuntos que actualmente concentran la atención de la comunidad global.
Con unas 200 sesiones, el foro de este año ha sido a la vez agitado y productivo, y ha cubierto un amplio rango de asuntos, desde las fábricas del futuro, las empresas digitales, los medicamentos inteligentes y el mapeo cerebral, hasta las virtudes y los defectos de una sociedad conectada digitalmente.
En otra reunión, participantes de todos los rincones del planeta intercambiaron puntos de vista sobre el posible impacto de la Iniciativa de la Franja y la Ruta en la movilidad humana y los patrones de migración, y debatieron también sobre los principales desafíos que afrontan los proyectos de la iniciativa, especialmente en lo que tiene que ver con la financiación sostenible, la inversión ética y la transparencia.
"Nos estamos reuniendo aquí en un momento en el que el mundo se encuentra en una encrucijada entre ser consumido por tensiones y conflictos o ser capaz de formar su futuro a través de esfuerzos innovadores, inclusivos y colaboradores", dijo Schwab, para luego referirse a la necesidad de formar un nuevo marco para la cooperación global.
"Necesitamos un sentido de intereses y valores comunes renovado para animar a los pueblos y los Estados a aceptar reglas comunes a la hora de conectarse unos con otros. En un mundo multipolar, los acuerdos ya no pueden ser impuestos por los países más poderosos. Para garantizar la eficacia y la legitimidad, deben ser diseñados y creados en conjunto", manifestó el experto economista.
Por su parte, el primer ministro chino, Li Keqiang, sostuvo que el Foro Davos de Verano ha contribuido a la búsqueda de nuevos caminos y motores para el crecimiento y la transformación globales.
"En el marco de la nueva revolución industrial nadie puede desarrollarse sin interrelacionarse con los otros, por eso debemos aprovechar las fortalezas propias y las de los demás y actuar conjuntamente para nutrir y promover la innovación en busca de beneficios compartidos", señaló Li.