BUENOS AIRES, 20 sep (Xinhua) -- En medio de una tensa situación financiera y nuevas conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el desempleo en Argentina alcanzó en los primeros seis meses del 2018 el 9,6% de la población, según informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
De acuerdo con el informe trimestral sobre mercado laboral, el INDEC reflejó que la cifra porcentual al término del segundo trimestre está dos puntos por encima del número de desocupación al cierre del año 2017.
En términos interanuales la "desocupación abierta" varió cerca de 1%, dado que en el segundo trimestre del 2017 los niveles de desempleo rondaron el 8,7%.
Según el ente estatal, el número de desocupados en Argentina aumentó de un millón 580.000 personas a un millón 850.000, considerando solo la población urbana.
En tanto, la sub-ocupación alcanzó el 11,2%, un nivel que se mantiene en comparación con el año anterior. Actualmente, las personas que trabajan jornadas cortas suman más de dos millones de habitantes.
El documento oficial refleja que las mujeres entre 14 y 29 años son las más afectadas por el desempleo con una cifra que alcanza el 21,5% de este sector.
La víspera, el INDEC informó que el Producto Bruto Interno (PBI) de Argentina cayó en el segundo trimestre del 2018 un 4,2 por ciento respecto al mismo período del año anterior.
El pasado lunes, el ministro de Economía, Nicolás Dujovne, estimó que la economía argentina se contraerá un 2,4 por ciento durante el año corriente, como consecuencia de una serie de "shocks internos y externos".
"Esta caída en la actividad es el resultado de una serie de shocks externos e internos que encontraron a la economía argentina todavía vulnerable ya que no habíamos terminado de corregir los fuertes desequilibrios heredados", sostuvo.
Argentina espera un incremento del desempleo y la pobreza producto de la volatilidad cambiaria acentuada en mayo y agosto, aunque es optimista respecto a las proyecciones de la actividad económica para el año que viene, cuando se prevé una recuperación de la economía del 0,5 por ciento.