GINEBRA, 11 sep (Xinhua) -- El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, volvió a reunirse hoy en Ginebra con diplomáticos de Irán, Rusia y Turquía para discutir el proceso para seguir adelante y poner fin al conflicto sirio con las conversaciones sobre la Constitución.
El enviado de la ONU no habló con los periodistas después de su discusión, pero el jefe de prensa del Servicio de Información de la ONU en Ginebra, Rheal LeBlanc, dijo en una conferencia de prensa que las conversaciones continuaron hoy y se reanudarán el viernes.
Sobre las conversaciones de paz, De Mistura indicó con anterioridad en Ginebra que sus discusiones con importantes funcionarios rusos, turcos e iraníes del 10 y 11 de septiembre para el nuevo proceso son el mejor "mapa de ruta que podemos ver".
Las conversaciones de hoy serán seguidas por nuevos encuentros el 14 de septiembre con importantes delegaciones de otros siete Estados: Egipto, Francia, Alemania, Jordania, Arabia Saudí, Reino Unido y Estados Unidos.
Las conversaciones sostenidas hoy por De Mistura se producen luego de que altos funcionarios de la ONU expresaron profunda preocupación por las consecuencias humanitarias de un ataque esperado contra Idlib, en donde es probable que ocurra una inminente ofensiva de fuerzas sirias apoyadas por Rusia.
Jens Laerke, vocero de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, leyó una declaración sobre la escalada de violencia en el noroeste de Siria emitida por Panos Moumtzis, coordinador regional humanitario para la crisis siria.
"La más reciente escalada está impactando otra vez a los civiles de forma dramática. Nuestro temor como agentes humanitarios es que lo peor esté por venir", dijo Laerke.
"La seguridad y protección de alrededor de 2,9 millones de civiles que residen en Idlib y los alrededores están en riesgo. Esto incluye a unos 1,4 millones de desplazados internos, en su mayoría mujeres y niños que llegaron a la región desde otras áreas", añadió.
Idlib es una de las cuatro "zonas de distensión" en Siria establecidas conforme a un acuerdo alcanzado el año pasado por Irán, Rusia y Turquía en Astaná, capital de Kazajistán. Las otras tres no han sido respetadas.
Aunque la mayoría de los habitantes de Idlib son civiles, también se han agrupado en el lugar organizaciones terroristas, combatientes extranjeros y grupos opositores armados. Fin
