RIO DE JANEIRO, 7 sep (Xinhua) -- El ataque sufrido el jueves por el candidato a la Presidencia de Brasil, Jair Bolsonaro, puede tener repercusiones imprevisibles en la campaña electoral para los comicios del 7 de octubre próximo, explicaron hoy viernes especialistas brasileños.
El profesor del centro de estudios Fundación Getulio Vargas (FGV), Carlos Pereira, expuso a Xinhua que "es una mala noticia que un candidato a la Presidencia sufra un atentado".
"Para poder calcular la repercusión que tendrá, necesitamos saber cómo se posicionará el candidato. Una posible opción es la de martirización", comentó.
El también politólogo consideró que Brasil ya tiene "un mártir", el ex presidente Luis Inácio Lula da Silva (2003-2010), quien se encuentra en prisión, "y ahora tendremos un candidato que fue apuñalado, con lo que la disputa política ganará más dramatismo".
Bolsonaro, candidato presidencial del Partido Social Liberal (PSL), fue apuñalado en el abdomen el jueves por un hombre cuando participaba en un acto político en Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais (sureste).
El polémico político brasileño, quien lidera los sondeos de intención del voto, fue trasladado de urgencia a la Santa Casa de la Misericordia de Juiz de Fora, donde fue operado.
Según los médicos que le atendieron, su estado de salud era "estable", por lo que la mañana de este viernes fue trasladado en avión a Sao Paulo, donde permanecerá hospitalizado entre una semana y 10 días.
El ataque provocó la inmediata reacción de la clase política brasileña, mientras que las redes sociales evidenciaron la polarización que hay en Brasil.
"El ataque puede cambiar el rumbo de las elecciones. Bolsonaro lidera los sondeos para la primera vuelta, pero pierde en prácticamente todos los escenarios en la segunda vuelta, y esto puede cambiar a partir de ahora. Es un choque muy grande para la campaña electoral", expresó Pereira.
El entrevistado consideró que "los efectos que puede tener el ataque dependerán de quién sea identificado como el responsable".
"Parte del electorado puede utilizarlo para ver una martirización de Bolsonaro, mientras que otra puede argumentar que el candidato puede haberse perjudicado por el enaltecimiento y la apología que hace de la violencia, que puede haberse girado en su contra", dijo.
"Las causas son el proceso de radicalización política que hay en Brasil, de esto no hay ninguna duda", agregó el profesor.
Por su parte, el doctor en ciencia política de la Universidad de Sao Paulo (USP), Marco Aurélio Nogueira, refirió a Xinhua la importancia de lo sucedido.
"El resto de candidatos a la Presidencia deben explotar este hecho como una alerta para que la sociedad no se comporte de forma más violenta, ya sea en la campaña electoral o en su día a día. Es atemorizante", dijo.
"Las cosas ya estaban superando el límite de lo razonable en el campo del debate verbal, y cuando llegan a este nivel, debemos encender todas las alertas. La sociedad brasileña no merece que la disputa electoral acabe en este tipo de violencia", expresó.
Nogueira recordó que Brasil "nunca tuvo un atentado similar al de ayer, y lo que provocó es una gran repercusión internacional que empeora todavía más la imagen del país".
La agresión se cometió unos días después de que el incendio y destrucción del Museo Nacional de Brasil, en Río de Janeiro, le dio la vuelta al mundo.
"Por un sentido de empatía, la aprobación de Bolsonaro debe subir y su rechazo, que era muy alto, reducirse. El problema es que ahora él quedará fuera de la campaña durante unos días, y la falta de exposición en los medios y las calles puede perjudicarle", apuntó.
El doctor en ciencia política consideró que Brasil vive una escalada de la tensión política desde hace tiempo.
"Todo empezó con un 'nosotros contra ellos', después los 'coixinhas versus mortadelas' y 'tucanos contra petrallas' (seguidores del Partido de la Social Democracia Brasileña contra simpatizantes del Partido de los Trabajadores)", expresó.
Agregó que la escalada de tensión política continuó con los disparos a un autobús de la caravana del ex presidente Luis Inácio Lula da Silva (2003-2010) y ahora la puñalada a Bolsonaro.
Para Aurélio Nogueira es claro que "la martirización del candidato es evidente tras este triste episodio", aunque no sabe si será suficiente para que gane las elecciones.
"En 2014, el socialista Eduardo Campos murió en un accidente de avión en plena campaña electoral y su vicepresidenta, que lo reemplazó, no ganó", recordó el entrevistado.
"Ahora creo que el hecho causará una conmoción menor, porque no hubo muertos, y por el contrario, habrá más convulsión en el país", complementó.
En tanto, el profesor Fernando Schuler comentó que "la violencia crea una permisibilidad y el gran riesgo de este triste episodio, es que se produzca una escalada de la violencia en la política".
Para el maestro del Insper, institución dedicada a la educación superior centrada en negocios, economía e ingeniería, "el efecto electoral del ataque, ahora mismo es secundario".
"Fue positiva ver la reacción de los otros 12 candidatos condenando la agresión. Las especulaciones sobre la ventaja o desventaja en las elecciones son precipitadas", agregó.
"Lo que sucedió con Bolsonaro es fruto de la tensión política y del discurso recíproco muy radicalizado. No se justifica en nada, pero acaba creando un clima que puede provocar que una persona perturbada acabe cometiendo actos salvajes", completó.
Schuler no consideró que el atentado pueda servir para destruir el discurso favorable a las armas que tiene Bolsonaro, "precisamente porque ahora él mismo es la víctima y tiene la oportunidad de aprovecharlo en su campaña".
"El problema no es tanto la polarización, es la violencia política. Los otros candidatos a la Presidencia deben solidarizarse con él en nombre de la pacificación política. Una cosa es una elección muy disputada, la otra es una elección disputada en el campo de la violencia", apuntó.
Bolsonaro lidera las encuestas de intención de voto con un 22 por ciento de cara a las elecciones presidenciales del 7 de octubre próximo.
Le siguen en las preferencias electorales la ex ministra y ambientalista, Marina Silva, y el ex ministro laborista, Ciro Gomes.
El porcentaje de Bolsonaro en las intenciones de voto (22 por ciento) es insuficiente para vencer en la primera vuelta electoral, por lo que tendría que ir a la segunda vuelta programada para el 28 de octubre, en la que los sondeos vaticinan una derrota frente a casi todos los aspirantes.