MEXICO, 3 sep (Xinhua) -- Especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) confirmaron hoy lunes que los indígenas prehispánicos del país destilaban mezcal muchos siglos antes de lo que se pensaba, mucho antes de la llegada de los españoles.
"El proceso de destilación no fue traído por los españoles en el siglo XVI, pues ya era usado en los años 600 y 400 a.C. (antes de Cristo) en la zona de Xochitécatl-Cacaxtla, (estado de) Tlaxcala", puntualizó la máxima casa de estudios de México en un comunicado.
Prueba de ello es el hallazgo de una serie de hornos descubiertos en Tlaxcala, los cuales eran usados en la producción de mezcal entre los años 600 y 400 a.C.
En 1519, Hernán Cortés emprendió desde España la conquista de México y el 3 de mayo de ese mismo año fundó la ciudad de Villa Rica, en el estado de Veracruz (este).
Los especialistas Avto Goguitchaichvill y Juan Morales, del Servicio Arqueomagnético Nacional (SAN) de la UNAM en Morelia, Michoacán (suroeste), realizaron distintos análisis que confirman que los hornos se usaron entre los años 557 y 487 a.C. para procesar el maguey y producir mezcal.
Hasta hace poco se consideraba que el proceso de destilación llegó a México en el siglo XVI a través de los españoles, quienes a su vez lo aprendieron de los árabes, y que la principal bebida alcohólica en las sociedades mesoamericanas era el pulque, un tipo de fermentado del maguey.
"Esto nos muestra que hace 25 siglos esas sociedades no eran nómadas ni cazadoras-recolectoras, sino altamente sofisticadas, con conocimientos a la par de los árabes y los europeos", explicó Goguitchaichvill.
Para conocer la época en que se utilizaron los hornos, los investigadores recurrieron al carbono 14, uno de los sistemas de datación más usados, y para tener mayor certeza acudieron al Servicio Arqueomagnético Nacional.
El equipo de Goguitchaichvill realizó estudios a 35 objetos encontrados en la zona (rocas, muestras de suelo y fragmentados en dos vasijas), sometidos a diferentes experimentos de temperatura y magnetismo.
Los estudios mostraron dos posibles intervalos de uso de los hornos: entre los años 878-693 a.C. y entre 557-487 a. C., y al comparar los datos con los registros arqueológicos encontraron que coinciden con la primera ocupación de la zona, por lo tanto, dan mayor certeza a la hipótesis antes descrita.