CHENGDU, 1 ago (Xinhua) -- Liao Song da la bienvenida al periodo más ajetreado del año en el resort de árboles de bambú de Shunan cocinando platos hechos de diferentes partes de esta planta.
Liao tiene 36 años y es el propietario de un restaurante en la ciudad de Yibin, situada en la provincia de Sichuan, en el sudoeste de China. Ubicada en los tramos superiores del río Yangtse, la localidad cuenta con un clima favorable para que crezcan los árboles de bambú.
"Cuando era niño, mis padres los cortaban y vendían a una fábrica local de productos de bambú solo para llegar a fin de mes", recuerda.
En la década de los 80, el gobierno local decidió desarrollar el turismo en el área escénica de bambúes de Yibin.
En 2006, Liao dejó su trabajo en otro lugar y regresó a la ciudad, donde abrió el restaurante en la zona, que puede albergar a 200 personas.
"Mi restaurante es uno de los más favoritos del área. Vendemos de 2.000 a 3.000 kilos de cerdo en conserva hecho con mi propia receta todos los inviernos", apunta.
Con un número creciente de turistas atraídos por el área escénica, gracias al restaurante los ingresos anuales actuales de Liao superan los 200.000 yuanes (cerca de 29.300 dólares).
"Seguimos cortando bambúes, pero ahora lo hacemos para ayudarlos a crecer y hacer nuestra casa más ecológica", afirma.
Con una extensión de más de 8.667 hectáreas de bambúes, el área escénica recibió 1,3 millones de visitas, lo que supuso unos ingresos totales de 757 millones de yuanes el año pasado.
"Nuestro objetivo es ampliar el área de bambúes en unas 27.000 hectáreas y aumentar su producción económica a 30.000 millones de yuanes antes de 2020", indica Lei Jingwei, jefe del departamento forestal de la ciudad de Yibin.
Según Lei, en la localidad hay 208.000 hectáreas de bambúes, y aparte del turismo, el gobierno también está desarrollando industrias relacionadas con el bambú.
Huang Yuanqiang, quien ha trabajado en el sector de construcción durante muchos años, invirtió 40 millones de yuanes y en 2014 abrió una fábrica donde produce tarima en Changning, un distrito de la ciudad.
"Dado que el bambú no se rompe tan fácilmente como la madera, la tarima de bambú se puede usar para suelos exteriores", explica. Se estima que la compañía tendrá una producción económica de 150 millones de yuanes cuando esté plenamente operativa.
Con el bambú también se pueden elaborar abanicos. Panda, empresa de elaboración de estos productos en el pueblo de Xingguang, por ejemplo, ha creado 200 empleos desde que se fundó hace seis años, la mayoría de los cuales son ocupados por lugareñas como Fu Hongmei.
Fu, madre de dos niños, puede elaborar unos 600 abanicos cada día, ganando alrededor de 30.000 yuanes al año. Destaca que está satisfecha con su trabajo en la empresa. "Puedo ganar dinero y tener más libertad mientras cuido a mi familia", comenta.
La empresa Panda produce unos dos millones de abanicos de bambú que se venden en su totalidad a Japón, según Wan Ying, ejecutivo de la firma.
La ciudad de Yibin planea desarrollar industrias relacionadas con bambúes y fomentar 20 principales negocios relacionados con esta planta antes de 2020 para crear empleos e incrementar los ingresos de los locales.