BERLIN, 29 jun (Xinhua) -- Los aficionados alemanes tendrán que esperar a la próxima semana para conocer la decisión final sobre el futuro de Joachim Loew, el entrenador de la selección alemana de fútbol.
El presidente de la asociación nacional de fútbol, Reinhard Grindel, anunció que todas las partes analizarán primero la decepcionante salida del equipo alemán de la Copa del Mundo en la fase de grupos.
Se rumora que Loew presentó su renuncia en Moscú antes de que la decepcionada delegación alemana iniciara el viaje de regreso a casa. En los medios se habló de una controversial discusión en el avión de Lufthansa y de que la asociación exhortó a Loew a reconsiderar. También se señala que los funcionarios confían en que el entrenador cumplirá con su contrato, el cual expirará en el 2022.
Mientras Loew se decide, varias encuestas indican que los aficionados alemanes quieren que renuncie. Los principales diarios, como Sueddeutsche y Die Welt, asumen que Loew renunciará pues la carga de un nuevo comienzo sería demasiado para él.
Se menciona al ex jugador internacional alemán Matthias Sammer como posible sucesor pues Juergen Klopp, el favorito de los aficionados (Liverpool) y Thomas Tuchel (Paris St-Germain) no están disponibles.
Horst Hrubesch, ex jugador internacional también fue mencionado al igual que Stefan Kuntz entrenador de la Sub21.
Los medios asumen que Loew tendrá que abandonar los patrones de trabajo que empleó durante años en sus esfuerzos por desarrollar un nuevo y joven equipo y que tendría que dejar a atrás a la mayoría de sus héroes de la Copa Mundial 2014.
Loew dijo que los cambios radicales son inevitables: "En los últimos 10 años hemos sido el equipo más consistente, pero ahora necesitamos cambios de gran alcance". El entrenador de 58 años de edad también ha admitido que el mal desempeño fue su responsabilidad.
Los aficionados lo acusan de haber perdido el contacto con su equipo. Entre el 55 y el 68 por ciento de ellos se oponen a que continúe y sólo el 33 por ciento votó por su permanencia. Consideran que sus tácticas y la selección del equipo dejó mucho que desear y que ignoró las señales de que su equipo estaba dividido en grupos.
La mayoría de los simpatizantes esperan además que jugadores como Mesut Oezil, Sami Khedira y Mario Gomez renuncien.
Pero no sólo Loew y los jugadores han sido atacados, funcionarios como Grindel y el gerente general Oliver Bierhoff también han recibido fuertes críticas.
Los medios alemanes acusan a la asociación alemana de perder contacto con los aficionados por causa de demasiada comercialización.
El Sueddeutsche señala que Bierhoff alimentó una actitud arrogante y complaciente del equipo al elegir una sede del grupo cercana a Moscú pues se encontraba próxima al sitio de la semifinal y la final.
Pero el tema principal en Alemania es el futuro de Loew.
"Recuerdo en 2004 cuando Juergen Klinsmann y yo llegamos. Iniciamos varios cambios que al final condujeron a muchos años de éxito", dijo Loew.
La cuestión en este momento es quién estará a cargo de ayudar al fútbol alemán a superar una significativa depresión.