BEIJING, 18 jun (Xinhua) -- Un satélite con una antena dorada en forma de paraguas se encuentra en una órbita a más de 400.000 kilómetros de distancia de la Tierra, esperando la sonda lunar Chang'e-4, que podría ser el primer aparato en aterrizar suavemente en la parte oculta de la Luna.
El satélite de retransmisión para la Chang'e-4 establecerá un enlace de comunicación entre la Tierra y el lado oscuro de la Luna y podría servir a las sondas de otros países, contribuyendo así a la exploración científica internacional, señaló Ye Peijian, académico de la Academia de Ciencias de China y uno de los importantes expertos espaciales del país.
El satélite, llamado Queqiao, o Puente de las Urracas, fue lanzado el 21 de mayo y entró en la órbita de Halo alrededor del segundo punto de Lagrange (L2) del sistema Tierra-Luna, en donde puede "ver" tanto la Tierra como la cara oculta de la Luna.
Está previsto que la sonda lunar Chang'e-4, que abarca un módulo de descenso y un vehículo explorador, se lance a finales de este año. Su misión de explorar la cara oculta de la Luna fue propuesta por Ye, que ha trabajado en el programa de exploración lunar de China desde la Chang'e-1 desde hace más de una década.
La Chang'e-4 sucede a la Chang'e-3, que fue lanzada al cierre de 2013 y se convirtió en el primer artefacto espacial chino que aterrizó de forma controlada y exploró un objeto extraterrestre.
Después de que la Chang'e-3 concluyera su misión, el sector espacial de China debatió el destino de la Chang'e-4. Algunos estaban a favor de aterrizar de nuevo en el lado cercano de la Luna, puesto que es más seguro.
"No estaba de acuerdo con eso. ¿Por qué la Chang'e-4 debería repetir lo que la Chang'e-3 había hecho? No debemos tener miedo al fracaso en la exploración científica. Necesitamos innovar", destacó Ye.
El experto sugirió que se mandase la Chang'e-4 al lado oscuro de la Luna, lo que no tenía precedentes y era innovador.
Como el primer satélite que opera en la órbita de Halo alrededor del punto L2, Queqiao usó cantidades relativamente pequeñas de combustible durante su viaje a la órbita planeada, ya que estaba bajo control preciso. Su vida diseñada es de tres años, pero Ye señaló que podría trabajar entre siete y ocho años.
Esto quiere decir que también puede proporcionar comunicaciones para sondas procedentes de otras naciones si intentan explorar la cara oculta de la Luna en el futuro cercano.
Un enlace confiable de transmisión de datos a larga distancia es una meta tecnológica clave para los expertos en espacio de todo el mundo. Queqiao lleva una antena en forma de paraguas con un diámetro de 4,2 metros, la mayor antena de comunicación usada en la exploración del espacio profundo.
Su nombre, Queqiao, fue seleccionado de más de 100 nombres candidatos en un concurso público.
En un cuento popular chino, las urracas forman un puente para ayuda a Zhi Nyu, una hija de la Diosa del Cielo, a reunirse con su amado esposo Niu Lang, un pastor de vacas, después de que fueran desterrados a los lados opuestos de la Vía Láctea.
"Creemos que el nombre es fácil de entender y significa el establecimiento de un puente de comunicación", explicó Ye.