MEXICO, 12 jun (Xinhua) -- Los crecientes vínculos de América Latina con China son cada vez más notorios en diversos campos y los temas cultural, artístico y lingüístico han sido esenciales para reforzar en los últimos 40 años el acercamiento y entendimiento entre las sociedades, coincidieron expertos, intelectuales y estudiantes universitarios mexicanos.
Marisol Villela, egresada de la China Academy of Art, concluyó el año pasado sus estudios sobre las conexiones culturales y artes plásticas de América Latina y China en el siglo XX, algo que asegura ella misma, le ha permitido "abrir el espectro sobre lo que representa e implica la relación mutua".
"Muchas veces me impresionan las cifras que se manejan en la relación económica y comercial, pero también es importante destacar que el poder conocernos en otros ámbitos como los culturales, además de ampliar el conocimiento, sin duda nos ayudará siempre a entender mejor en todos los ámbitos; el humanismo engloba todo", expuso en entrevista con Xinhua.
Villela, que además iniciará en 2019 un doctorado de la conexión China-América Latina a través de la historia y arte en la Universidad de Pittsburg, acudió recientemente al Centro de Estudios China-México (Cechimex), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), invitada para impartir una conferencia titulada "La llegada de 1956: el modernismo socialista y los intercambios artísticos de China y México en la década de 1950".
La joven de 25 años sostuvo que "el intercambio cultural debe redoblarse entre América Latina y China, algo que demandan los jóvenes y la sociedad en general para entenderse mejor y acercarse".
"Sin duda, ello es el reflejo de lo que pasa en la sociedad y está muy conectado y plasmado en obras, en la danza, pintura, escultura e idioma (...) Creo que el intercambio de estudiantes en ambos lados ha aumentado y es algo que hay que destacar pues yo puedo decir que los que hemos tenido la oportunidad de estudiar y vivir en China, sin duda nos enriquecemos pues podemos conocer esta sociedad tan cambiante y regresar y compartir en nuestros países lo que son y explicarlo para entendernos mejor", abundó.
En coincidencia, la profesora e investigadora de la UNAM y de la Universidad Anáhuac, Mariana Escalante, sostuvo que "es fundamental" seguir manteniendo el intercambio cultural entre la región latinoamericana y China, ya que "se vuelve algo más accesible la relación y el entendimiento. Es a través de ese camino donde realmente se une a las dos poblaciones".
"Los otros temas como los económicos o políticos, aunque van de la mano con otros campos, creo que son más desde el punto de vista de las élites, de los intelectuales, académicos, pero la cultura además, tiene esta magia que permite que puedas acercar a los dos pueblos", destacó en declaraciones a Xinhua.
Mencionó que en el caso particular de México y China, en los últimos años, "y con el impulso del embajador de China en México se han reforzado los intercambios culturales y artísticos que acercan de una manera mágica a las dos sociedades".
A manera de ejemplo, la erudita, quien además cuenta con una Maestría en Relaciones Internacionales por la Universidad de Pekín, dijo que cada vez "existe mayor participación de mexicanos en tradiciones y festejos como el Año Nuevo Chino o en ferias en las que se da a conocer la música, danzas, manualidades y hasta la gastronomía china".
Para la académica e investigadora del Centro de Estudios de Asia y Africa de El Colegio de México, Liljana Arsovska, aunque los lazos de amistad y culturales entre América Latina y China son ancestrales, dijo que también es necesario intensificar los estudiantiles, así como "seguir aumentando las ferias, seminarios o talleres de literatura o importantes exposiciones de arte clásico y contemporáneo".
Eso no solo amplía el conocimiento, también atiende la inquietud de la sociedad, de los jóvenes y de todos los que están ávidos de emprender ese nuevo camino de hermandad y complementariedad de un nuevo contexto social global, agregó.
El diplomático Eugenio Anguiano Roch, el primer embajador de México en China (1972-1976) tras el establecimiento de los lazos diplomáticos, se pronunció en favor de "seguir incrementando esos lazos e intercambios amistosos y culturales que por cuatro décadas "han permitido tener un mejor entendimiento de una y otra parte".
"Sin duda también el trabajo por delante es seguir creciendo los intercambios personales y culturales", añadió.
No obstante, el diplomático, quien repitió como embajador en China de 1982 a 1987, reconoció que "aún falta mucho por hacer ya que en ocasiones también ha sido complejo por el idioma".
"Definitivamente la diferencia de idioma es algo que aún se sigue trabajando de una y otra parte y eso definitivamente ayudará más a estrechar la convivencia y entendimiento, principalmente en generaciones presentes y futuras que ahora ante la globalización cada vez están más cerca e interesados de entenderse mejor de una y otra parte", agregó.
En tanto, el coordinador del programa estudios Asia-Pacífico del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM, privado), Ulises Granados, destacó la voluntad y esfuerzo de ambas partes por buscar una mayor cooperación en el tema cultural, pero también en otros campos como lo es la ciencia, tecnología, aspectos sociales y deportivos.
"China en sus embajadas instaladas en la región, cuenta con nuevos mecanismos de intercambio, ya sean intercambios culturales, becas, festivales, exposiciones y creo que eso representa un momento importante de lo que se le puede dar como contenido al interés político actual y social", puntualizó el internacionalista al recordar que China tiene "una hoja de ruta para fortalecer la cooperación e integración chino-latinoamericana hacia una línea de progreso entre ambos lados". Fin