LA HABANA, 25 may (Xinhua) -- La franquicia Domadores de Cuba apabulló este viernes 5-0 a los Gallos de Pelea de Francia en el segundo cartel semifinal de la VIII Serie Mundial de Boxeo (WSB, siglas en inglés), en La Habana, y clasificó a la gran final.
En el coliseo de la Ciudad Deportiva de la capital cubana, los anfitriones exhibieron una excelente preparación física y alto nivel técnico frente a la escuadra visitante, que se vio superada por completo a pesar de contar con tres púgiles profesionales, ninguno de los cuales pudo terminar su combate.
El primer pleito del cartel nocturno en el formato C-1 (49, 56, 64, 75 y 91 kilogramos) incluyó al campeón nacional cubano de la división más pequeña, Damián Arce, y al refuerzo español Samuel Carmona, quinto lugar olímpico en Río de Janeiro-2016 y número uno del ranking de la actual WSB.
Desde el mismo inicio de la pelea Arce no dio tregua a su rival, fue todo el tiempo hacia delante en busca del representante galo y con una resistencia y efectividad de golpeo formidables durante los cinco asaltos, se impuso por votación unánime de los jueces (50-45, 49-46 y 50-45)
Con idéntico marcador de 3-0 logró imponerse el bicampeón olímpico de los 56 kilos, Robeisy Ramírez, quien volvió a derrochar maestría ante el espigado Samuel Kistohurry y mereció el veredicto de los imparciales (49-46, 48-47 y 49-46).
Como los Domadores ganaron 3-2 el primer cartel de la semifinal en París, los caribeños llegaron a cinco triunfos en el resultado global, por lo que los Gallos de Pelea estaban obligados precisamente a eso, a dar pelea y ganar los restantes tres enfrentamientos de la velada, para lo cual contaban con las tres figuras del boxeo rentado.
Pero el monarca universal de los 64 kg, Andy Cruz, no creyó en el palmarés de su rival Morgan N'Dong, de origen gabonés, quien ostenta 19 éxitos y cuatro reveses en la "pro", y tras disertar una clase magistral de técnica boxística le propinó un fulminante nocao en el tercer asalto, como para que no se le olvide su debut en series mundiales.
Luego de la más impresionante victoria de Cuba en el cartel y con el boleto a la final asegurado, a los franceses solo les quedaba evitar la barrida.
Entonces subió al cuadrilátero el titular olímpico y del orbe Arlen López (75), y aunque la pelea frente a Martin Owono, oriundo de Camerún y también debutante en la WSB, resultó la de menor intensidad de golpes, el cubano supo imponer su clase y tras provocar dos conteos de protección en el cuarto asalto, su contrincante declinó salir a combatir en el quinto round.
A continuación, Erislandy Savón, dorado universal de los 91 kilos, puso el punto final a la blanqueada al liquidar por abandono en el quinto capítulo a Sylvain Luce, un púgil de escasos recursos técnicos que apenas tiró golpes y se limitó a empujar al cubano.
De esta manera, el equipo Domadores de Cuba se impuso con marcador global de 8-2 y no fue necesario el combate adicional fijado en la categoría de los 69 kg para buscar desempate.
Con la mira puesta en la reconquista del título que el año pasado se le escapó a última hora, la escuadra antillana, campeona en 2014 y 2016, espera ahora por el ganador del match entre los Astaná Arlans, de Kazajstán, y Corazones de León, del Reino Unido, que se dirimirá este sábado en suelo kazajo.
Esta semifinal marcha 3-2 favorable a los Astaná Arlans, que de ganar definitivamente, reeditarían con los cubanos las finales de 2015 y 2017, que en ambos casos la corona quedó en manos de los tricampeones europeos.
