GOYANG, abril 26, 2018 (Xinhua) -- Personas observan una pantalla en la que se ve al presidente surcoreano, Moon Jae-in (d), y al máximo líder de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), Kim Jong Un (i), estrechando sus manos en la aldea fronteriza de Panmunjom, desde un centro de medios en Goyang, República de Corea, el 26 de abril de 2018. El presidente surcoreano, Moon Jae-in, y el máximo líder de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), Kim Jong Un, comenzaron conversaciones formales en la parte surcoreana de la aldea fronteriza de Panmunjom en la tercera cumbre intercoreana de la historia. (Xinhua/Wang Jingqiang)
GOYANG, Corea del Sur, 27 abr (Xinhua) -- Bajo la intensa mirada de todo el mundo, el presidente surcoreano, Moon Jae-in, y el máximo líder de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), Kim Jong Un, se reunieron este viernes en la aldea limítrofe de Panmunjom con la esperanza de iniciar una nueva era de paz en la península.
El encuentro entre Moon y Kim, la tercera cumbre intercoreana, se produjo 11 años después de la anterior reunión de líderes de los dos países y se da en un momento en que los lazos bilaterales se han tornado afectuosos entre las dos Coreas tras las iniciativas emprendidas por Seúl y Pyongyang, y otras partes relacionadas, sobre el tema nuclear en la península coreana.
Los primeros dos encuentros de esta clase se realizaron en Pyongyang en los años 2000 y 2007.
En la mañana del viernes, la caravana de Moon llegó al lado surcoreano de Panmunjom unos 30 minutos antes de la llegada de Kim, programada para las 09:30 hora local (00:30 GMT).
Kim apareció en el lado de la RPDC de Panmunjom alrededor de la hora prevista y caminó a través de la línea de demarcación militar que divide la aldea limítrofe.
Los dos líderes conversaron y tuvieron un largo apretón de manos parados primero en un lado y luego cruzaron al otro lado de la losa de cemento que señala el borde que divide a las dos Coreas.
Kim cruzó la línea de demarcación militar hacia el lado de Corea del Sur, convirtiéndose en el primer líder de la RPDC en pisar el suelo surcoreano después de la Guerra de Corea (1950-1953).
Posaron para los medios dando la cara a cada uno de los lados de la línea de demarcación y luego Kim invitó a Moon a cruzar brevemente la frontera e ingresar a territorio de la RPDC. El episodio despertó los aplausos de los asistentes al encuentro.
Los líderes regresaron entonces al lado surcoreano de Panmunjom agarrados de las manos e irradiando amplias sonrisas en sus rostros.
Escoltados a lo largo de la alfombra roja por la tradicional guardia de honor de Corea del Sur, caminaron a una plaza localizada entre la Casa de la Libertad y la Casa de Paz, el lugar para la histórica cumbre.
Moon y Kim pasaron revista a la guardia de honor y después de eso saludaron a los delegados oficiales de ambos lados que los acompañaban.
Kim entró en la Casa de Paz y en la recepción firmó el libro de invitados con la frase: "Una nueva historia inicia ahora, es el punto de partida de una era de paz".
Ambos posaron para la foto conmemorativa en el primer piso de la Casa de Paz y luego subieron al segundo piso para un diálogo formal.
"Ese momento en que el presidente Kim cruzó la Línea de Demarcación Militar en Panmunjom se convirtió en un símbolo de paz, no en un símbolo de división", dijo Moon momentos antes de iniciar las conversaciones.
Después de los diálogos formales, Kim regresó al lado de la RPDC de Panmunjom para tomar un receso y almorzar.
La segunda ronda de diálogos formales entre los dos líderes, a la cual seguirá un banquete, tendrá lugar en la tarde del viernes.
La cumbre se produce momentos después de que las relaciones entre Seúl y Pyongyang dieron un giro positivo al inicio de este año, especialmente durante los Juegos Olímpicos de Invierno realizados en el condado surcoreano de PyeongChang (oriente).
Los dos líderes tienen previsto conversar acerca de la desnuclearización y convertir su acuerdo de tregua en un régimen de paz.
"Estoy muy contento de que se realice la cumbre y quiero saber cómo las dos partes pueden discutir una paz duradera en la península y la reunificación de las familias separadas", dijo Oh Sun-myeong, un ama de casa de 47 años en Seúl.
Asegurando que se trata de una "brisa cálida" soplando sobre la península coreana, Troy Stangarone, director del Instituto Económico de Corea, un centro de investigación política sin ánimo de lucro con sede en Washington, indicó que también se le debe dar un gran crédito a los países a países que estuvieron involucrados, como China, "por crear el ambiente necesario para la realización de la cumbre intercoreana".
Como la principal parte interesada, China ha estado dedicada a buscar el desarrollo de la paz en la península coreana y propuso una aproximación de "doble vía", avanzar en la desnuclearización y mientras tanto establecer un régimen de paz, con las partes relevantes.
Además, Beijing instó a todas las partes involucradas a promover conversaciones fluidas entre los líderes de Corea del Sur y la RPDC, así como entre Kim y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con el fin de alcanzar un acuerdo político en la península.
Kim visitó Beijing del 25 al 28 de marzo y sostuvo diálogos con el presidente de China, Xi Jinping.
"Moon Jae-in tiene una visión de coexistencia pacífica con la RPDC. Esa es la visión correcta", dijo Adam Mount, director del Proyecto de Posición de Defensa de la Federación de Científicos de Estados Unidos, en entrevista con CNN.
A la cumbre del viernes le seguirá un encuentro entre Kim y Trump en mayo o principios de junio.