MADRID, 12 abr (Xinhua) -- El jesuita Diego de Pantoja (Valdemoro, España, abril de 1571-Macao, China, 9 de julio de 1618), precursor del intercambio cultural entre ambos países, es homenajeado por parte del Instituto Cervantes de Madrid en el 400 aniversario de su muerte.
De Pantoja, que llegó a China en 1597, es considerado el introductor de la religión cristiana en China y fue el único español que accedió a la corte del emperador de la dinastía Ming Wan Li, en la Ciudad Prohibida, donde acudía con frecuencia para enseñarle a tocar el clavicordio.
El Instituto Cervantes presentó el miércoles el "Año Diego de Pantoja" para rendirle homenaje con un programa que incluye conciertos, conferencias, encuentros, presentaciones de libros o debates que se realizarán en Madrid, Beijing, Shanghai y Macao.
Considerado el padre de la sinología, fue el gran precursor de las relaciones culturales entre el mundo en español y China, y propició la difusión del conocimiento entre ambas partes, según afirmó el Instituto en un comunicado.
El director de la institución, Juan Manuel Bonet, destacó la figura del jesuita, quien vivió más de 20 años en China y acercó este país a España gracias a sus crónicas.
"Es una ocasión única para reflexionar sobre las relaciones entre España y China, que es un país fundamental para el Instituto Cervantes", añadió.
El embajador de China en España, Lyu Fan, elogió la influencia del estudioso español, que fue "capaz de superar la barrera entre dos mundos hasta entonces desconocidos".
Por su parte, el secretario de Estado de Cooperación Internacional para Iberoamérica y el Caribe de España, Fernando García Casas, pidió seguir el ejemplo del jesuita y "buscar la fusión entre diferentes culturas".
"Debemos reforzar el entendimiento con China y seguir siendo socios, amigos y aliados de un país que es el tercer proveedor de España y que nos envía más de 600.000 turistas anuales", expresó.
