BUENOS AIRES, 10 abr (Xinhua) -- La ausencia del presidente estadounidense, Donald Trump, en la VIII Cumbre de las Américas en Lima, muestra que las prioridades de Estados Unidos están en otro lado y no en la región, afirmó hoy el experto argentino, Jorge Castro.
A pocos días de la inauguración de la Cumbre de las Américas, la Casa Blanca anunció este martes que Trump no viajará a Perú ni a Colombia este fin de semana, para "supervisar la respuesta estadounidense a Siria", y en su lugar enviará al vicepresidente Mike Pence.
En entrevista con Xinhua, Castro, presidente del Instituto de Planeamiento Estratégico (IPE), señaló que la ausencia de Trump "es bastante reveladora, marca que las prioridades de Estados Unidos están en otro lado".
"Para analizar la relación de Estados Unidos con la región, hay que separar lo que es la América Latina del norte, de la América Latina del sur", planteó el analista argentino.
En ese sentido, diferenció que "la América Latina del norte, la que va desde México hasta Panamá, ha completado su integración funcional con los Estados Unidos y Canadá, mientras que la América Latina del Sur, en términos de inserción, no tiene su integración con Estados Unidos".
La relación de la América Latina del Sur con Estados Unidos "es irrelevante", resumió el analista.
Durante la VIII Cumbre de las Américas, que se efectuará en Lima el 13 y el 14 de abril, los representantes de gobierno abordarán la "Gobernabilidad democrática frente a la corrupción", un tema que crea controversia en la región latinoamericana, debido al involucramiento de una decena de presidentes en escándalos de corrupción.
Para Castro, la corrupción en la región es un fenómeno sistémico en algunos países, entre los cuales mencionó a Brasil y, en otros casos, obedece a la debilidad de las instituciones.
"Un ejemplo de lo primero tiene que ver con la reciente detención en Brasil del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva. En Brasil, la corrupción es un fenómeno sistémico y ha formado parte del proceso de acumulación tradicional por lo menos desde hace 50 años", consideró el analista.
Sobre la debilidad institucional, Castro recordó que el anfitrión de la cumbre, el presidente peruano, Martín Vizcarra, asumió el cargo el pasado 23 de marzo en sucesión de Pedro Pablo Kuczynski, quien renunció en medio de una crisis política por sus presuntos vínculos con la constructora brasileña Odebrecht.
"Ello pone de relieve que la corrupción tiene como marco la debilidad institucional de la región", observó el analista argentino.
