SHANGHAI, China, 9 abr (Xinhua) -- Pocas personas piensan que la seda se puede utilizar como un escudo de defensa del cerebro, pero investigadores chinos han transformado el suave material de confección textil en tornillos para estabilizar los huesos del cráneo en cirugías cerebrales.
Los investigadores de un laboratorio de Shanghai extrajeron proteínas de seda de capullos del gusano de seda Bombyx mori y las convirtieron en artefactos de fijación como tornillos y bandas de conexión.
Después de años de experimentos en animales, incluidos roedores y conejos, los investigadores han mejorado las propiedades, incluyendo la fuerza y la resistencia.
La investigación fue encabezada por el profesor Mao Ying, vicepresidente del Hospital Huashan afiliado a la Universidad de Fudan, y por Tao Hu, investigador del Instituto de Microsistemas y Tecnología de la Información de Shanghai.
La investigación fue publicada como historia de portada en la edición más reciente de "Materiales Avanzados para el Cuidado de la Salud".
Mao señaló que la creación de materiales médicos para la fijación y reparación del cráneo es muy demandante. En el pasado, los tornillos empleados usualmente eran hechos de materiales metálicos, los cuales podían causar sensaciones de molestia por un cuerpo extraño, lo que generaba incomodidad.
El riesgo de infección y rechazo inmunológico de los materiales metálicos significa que algunos pacientes deban someterse a una segunda cirugía.
"En comparación con los materiales metálicos o químicos, los dispositivos de seda tienen una sobresaliente biocompatibilidad que evita una reacción a cuerpos extraños y una degradación controlada sin generar residuos peligrosos", explicó Tao, quien condujo la investigación a lo largo de tres años.
Los dispositivos de seda desarrollados por los investigadores chinos también incluyen una película en forma de chip que puede envolver medicamentos. Con la degradación de las proteínas de seda en el cerebro, la medicina en el interior se liberará para tratar la inflamación y cicatrizar el tejido lesionado.
La seda es mucho más barata que el metal. Mao comentó que un edredón regular de seda se puede convertir en miles de tornillos de seda, lo que reducirá los costos médicos.
Se espera que los dispositivos de seda completen las pruebas clínicas necesarias en un período de entre tres y cinco años.
