BOAO, Hainan, 8 abr (Xinhua) -- Las principales economías emergentes mantuvieron un impulso alcista en 2017 debido al importante aumento en la demanda externa y la estable demanda de consumo nacional, indicó hoy domingo un informe del Foro Boao para Asia (BFA, por sus siglas en inglés).
El texto, titulado "Desarrollo de las economías emergentes. Informe anual 2018" fue divulgado en la conferencia de prensa de la reunión anual del BFA, que se celebra del 8 al 11 de abril en la provincia insular de Hainan, en el sur de China.
Las principales economías emergentes, definidas por el foro como "E11", se refiere a las economías en el Grupo de los 20 (G20): Argentina, Brasil, China, India, Indonesia, República de Corea, México, Rusia, Arabia Saudí, Sudáfrica y Turquía.
Este grupo de países experimentó un crecimiento del Producto Interior Bruto cercano al 5,1 por ciento en 2017, o un incremento de 0,5 puntos porcentuales interanuales.
La expansión fue 1,4 puntos porcentuales más alta que la media mundial, permitiendo que el E11 liderase de manera continua entre las economías emergentes y en desarrollo, añade el documento.
El informe analiza su nuevo desarrollo en el crecimiento económico, empleo e ingresos, precios y política monetaria, comercio internacional, inversión directa internacional, materias primas internacionales y los mercados de deuda y financieros.
China, que es la mayor economía emergente del mundo, mantuvo un crecimiento económico medio-alto de 6,9 por ciento en 2017, contribuyendo aproximadamente a un tercio del crecimiento económico global y fue de manera continua la mayor contribuyente a la economía global, añade.
Rusia y Brasil salieron por ellos mismos de una prolongada recesión económica y su crecimiento económico pasó de negativo a positivo, acorde al documento.
En 2017, los mercados laborales de las economías emergentes fueron generalmente estables, con la relajación de la presión inflacionista, un robusto rebote del comercio internacional y un mercado financiero generalmente estable. A pesar de ello, sus niveles de deuda se han continuado incrementando y el crecimiento del comercio internacional ha permanecido débil, destaca el texto.