BUENOS AIRES, 28 feb (Xinhua) -- La política de reforma y apertura es uno de los ejes de la prosperidad y el desarrollo de China, destacó hoy la experta argentina María Cecilia Peralta.
En una entrevista con Xinhua, la economista e investigadora de temas asiáticos se refirió al 40° aniversario de la política de reforma y apertura de China, que se cumple este año: "En estas cuatro décadas, China tiene una prosperidad que nadie hubiera imaginado en la década de 1970", observó.
"Entre 1978 y 2018 hubo hitos y planes quinquenales que marcaron la historia económica y social de China y del mundo, y mostraron diferentes etapas de este modelo de desarrollo", remarcó Peralta.
La analista de la consultora Asia Viewers recordó que "en un primer momento estas reformas fueron materializadas en una nueva forma de administración y responsabilidad en cuanto a la tierra, lo cual generó un cambio en la productividad de la misma y la incorporación de tecnologías".
"Luego, se deben mencionar también el desarrollo de diferentes regiones costeras, llamadas zonas económicas especiales, lo cual generaría un impacto económico interno y en el mundo entero en el sector industrial", dijo.
"Ya en los años noventa, la apertura de la Bolsa de Shanghai, y a principios de los años 2000 el ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC), cuando se fijaron las metas que esta economía debía cumplir con el desarrollo de los años como proceso de integración mundial", añadió.
Consultada sobre puntos de interés en particular de estos 40 años, la experta se refirió al "hito del crecimiento económico durante una larga cantidad de años a tasas de dos dígitos, lo que el mundo denominó 'tasas de crecimiento chinas', haciendo referencia a esas tasas como el ejemplo a seguir, sobre todo teniendo en cuenta las dimensiones que esta economía posee".
"Luego de la crisis mundial del año 2008, China abandona las tasas de crecimiento de dos dígitos en un momento muy especial del mundo y logra posicionarse como la economía que hace volver a crecer al mundo luego de esta crisis denominándosela como 'la locomotora del mundo', y allí es cuando la comunidad internacional toma conciencia de este proceso de reforma y apertura", consideró.
Para Peralta, el proceso que comenzó en 1978 ha mostrado "su esplendor hasta para aquellos no especializados en materia internacional. Impacta en el mundo, desde los países más pequeños hasta en los más grandes, como lo son los países líderes de la Unión Europea y Estados Unidos".
La economista argentina subrayó en ese marco histórico el papel del presidente de China, Xi Jinping, "por la introducción de dos conceptos muy importantes para las políticas a desarrollar en lo internacional, en lo político, en lo económico y en lo social".
"Se trata -- dijo-- de los conceptos de 'La nueva normalidad", haciendo hincapié en el crecimiento y el desarrollo económico con una mirada hacia un crecimiento con calidad y de lineamientos muy marcados, y el concepto de 'Socialismo con características chinas', marcando así la forma en la que Estado va a intervenir en la economía en las futuras políticas públicas a desarrollar exponiendo de esta forma el marco de una nueva era".
"A 40 años de la implementación de las reformas, este país y sus habitantes se encuentran en una situación muy diferente a la del comienzo, con más de la mitad de la población en la urbanidad, con tasas de desempleo bajas, que rondan el 5%, con una tasa de crecimiento alta, del orden del 6,8%", expuso Peralta.
Agregó que China "es además un actor que participa de manera activa en la generación de políticas públicas globales, un referente en la generación de tecnología, con estrategias de desarrollo regional, en las cuales es impulsor, como en la Iniciativa de la Franja y la Ruta, con la generación de organismos multilaterales de crédito regionales, como el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII)".
A ello se suma, sostuvo, "el proceso de internacionalización de su moneda, el Renminbi o Yuan, con tasas de pobreza reducidas y la implementación de exitosos planes de seguridad alimentaria así como también mejoras en la provisión de bienes y servicios que hicieron que su población pudiera vivir de una manera sustancialmente mejor".
"En el último plan quinquenal la importancia en la coordinación de la política pública para lograr uno de los mayores desafíos, como lo es el cambio de la oferta agregada de bienes y servicios por medio de la incorporación de tecnología, es uno de las metas a lograr, sin duda alguna una de las más complejas", estimó.
Otro desafío a futuro, dijo, "es continuar el proceso de urbanización de la población de manera ordenada. Es un camino para lograr el sueño chino de 'una sociedad modestamente acomodada'", agregó.
"La continuidad en la apertura a nivel global, acompañado con la mejora del proceso de competitividad de las empresas públicas y la extranjerización de las mismas, requerimiento que debe completarse ya que es un acuerdo y compromiso internacional asumido", son otros de los grandes desafíos que hoy se enfrentan.