LANZHOU, 3 ene (Xinhua) -- Los esfuerzos por controlar la desertificación han revivido un lago secado en la provincia noroccidental china de Gansu.
El lago Qingtu tenía una superficie de 25,16 kilómetros cuadrados al cierre de 2017, pese a que había estado seco durante unos 50 años hasta 2010, resaltó el director de la oficina de recursos hídricos del distrito, Qiu Deyu.
El gobierno local estableció un pozo de monitorización de agua subterránea a un kilómetro del lago en 2007. Los datos muestran que la profundidad al agua subterránea pasó de 4,02 metros en 2007 a 2,94 en 2017, un aumento anual medio de 10,8 centímetros en los últimos diez años.
El lago Qingtu se encuentra en el curso inferior del río Shiyang, en el distrito de Minqin, donde confluyen los desiertos de Badain Jaran y Tengger. El distrito, conocido como el "hogar de la arena", es la principal fuente de tormentas de arena de China.
Qiu atribuyó el renacimiento del lago a la mejora ecológica a lo largo del río Shiyang y a la forestación en los desiertos de alrededor del distrito de Minqin.
"El antiguo lago secado se ha convertido ahora en un hábitat para aves migratorias", destacó Qiu.