MEXICO, nov 16 (Xinhua) -- La posible salida de Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no sería devastadora para México, afirmó hoy jueves el secretario (ministro) mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, aseguró el martes que el fracaso para modernizar el TLCAN tendría un efecto "devastador" sobre México y también perjudicaría a Canadá.
"No lo creo", respondió el secretario mexicano a Ross, en una entrevista para la Cadena Televisa.
"El problema que hay que analizar es cómo pega específicamente, regionalmente, y cómo impacta el equilibrio político de los agentes que finalmente van a votar por este tratado", agregó el ministro.
Guajardo indicó que el libre comercio recíproco representa a México el 40 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que para Estados Unidos sólo significa el 4 por ciento.
No obstante, también influye la política interna de Estados Unidos, en donde, por ejemplo, el cinturón de maíz estadounidense, del que México es un gran comprador, son legisladores republicanos muy fuertes, dijo Guajardo.
O habría que analizar cómo le pegaría al estado norteamericano de Washington que México deje de comprar manzanas rojas, explicó Guajardo.
"Sin duda México puede tener un impacto a corto plazo porque la marca, 'el branding', es muy sensible para los mercados", indicó el ministro.
"Nuestra capacidad de ajuste y la manera de cómo lo hagamos es lo que nos da la resistencia frente a los impactos de cualquier cambio", agregó.
Los negociadores de Canadá, Estados Unidos y México llevarán a cabo hasta el 21 de noviembre la quinta ronda para actualizar el TLCAN, vigente desde 1994, en la capital mexicana.
Se espera que en esta fase se aborden los temas más polémicos de la negociación, como las propuestas de Estados Unidos por elevar la regla de origen del sector automotriz o la cláusula de culminación del acuerdo cada cinco años.
El ministro dijo que México va a proponer evaluar la continuidad del pacto cada cinco años, sin pautar su "muerte súbita" como lo ha planteado Estados Unidos.
"Una muerte súbita manda una terrible señal a los mercados, lo que estamos haciendo es cambiarlo de lo negativo a lo positivo", dijo Guajardo.
Los tres países están actualizando el TLCAN desde el pasado 16 de agosto a petición del presidente estadounidense, Donald Trump, quien considera que el acuerdo ha perjudicado a su país e incluso ha amenazado con abandonarlo.
Al final de la cuarta ronda en Washington, los negociadores acordaron prolongar las conversaciones hasta el primer trimestre de 2018 para contar con más tiempo para el análisis de las propuestas.