Enfoque de China: Padre e hijo argentinos relatan su relación común con China

Spanish.xinhuanet.com   2017-11-10 20:55:27

BEIJING, 10 nov (Xinhua) -- Son dos argentinos: padre e hijo; uno, de edad avanzada, el otro, en su etapa más productiva; uno, vive en México, el otro, en China. A pesar de las diferencias, ambos son sinólogos y su historia con China refleja los grandes cambios del país asiático.

Para el padre, Aníbal Zottele, China es una vieja amiga. "Mi primer acercamiento fue cuando era muy joven, en la década de los sesenta", recuerda.

Por aquel entonces, China no era más que un país exótico para América Latina. "Como todos los jóvenes latinoamericanos con intereses en la política, me llamó la atención China por ser una referencia, y por su revolución como una posibilidad de cambiar las cosas en el mundo", según Aníbal.

La medicina veterinaria fue la especialidad original de Aníbal, menos relacionada con los estudios chinos. En los años ochenta, era asesor de sanidad animal en varias organizaciones internacionales. Sobre China, entonces menos desarrollada que actualmente, le llamó la atención una medicina de ganso que era muy usada en el campo.

Aníbal encontró que, con esta medicina, China "mejoraba la calidad de vida de la población".

El hijo, Esteban Zottele, empezó su historia con China en 1999, cuando visitó China como turista. El país asiático le sorprendió "por su historia, pero también por su futuro".

En 2004, Esteban decidió trasladarse a China. Obtuvo un doctorado en la Universidad de Renmin, abrió un restaurante de comida mexicana en Beijing y ahora trabaja en el Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Changzhou.

Para el padre, este viaje de Esteban también "fue decisivo en mi vida". Al conocer los cambios de China, Aníbal decidió dedicarse a los estudios chinos, publicó varias tesis sobre la modernización china y fue nombrado coordinador en el Centro de Estudios Chinos de la Universidad Veracruzana en 2008.

Según Aníbal, en esos años los estudios chinos eran novedosos. "Los economistas occidentales sólo veían el crecimiento en Japón, hablaban de la experiencia coreana, pero muy pocos estaban viendo lo que está sucediendo en China", recalca.

Y para el pueblo, el país oriental es aún más desconocido, "Cuando me invitaron en la Universidad Veracruzana en 2005," recuerda Aníbal, "todavía en esos años muchos mexicanos se preguntaban por qué un centro de estudios sobre China, y no sobre Bélgica o Francia, ya que se veía a China como un país más pobre".

Esteban cree que la clave del conocimiento mutuo se encuentra en la comunicación entre las personas. "La cultura de un país se puede conocer a través de libros, programas de televisión o películas, pero es el intercambio entre las personas el paso más importante para que se genere un profundo intercambio cultural", apunta.

Para promover este intercambio de personas, Esteban fundó en Beijing este septiembre la Asociación de Argentinos en China, que considera las asociaciones de chinos en el extranjero como sus modelos.

"Los chinos en Argentina cada día se integran más entre sí y con la comunidad local. También ha crecido la presencia de argentinos en China", comenta Esteban. Considera la asociación como "una plataforma para que los argentinos podamos difundir la cultura de nuestro país y ayudarnos mutuamente", añade.

Para ambos, el recién concluido XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China (PCCh) tiene mucha importancia. Aníbal elogia la decisión del PCCh de integrar el contenido sobre la Franja y la Ruta en los Estatutos del Partido. Lo considera como una gran oportunidad para los países en vía de desarrollo.

A Esteban le impresiona la gobernanza del PCCh. "China está planificando un camino a largo plazo", destaca. "Debemos cooperar con China, no sólo para esta mejora, sino también para aprender cómo en América Latina podemos tener planificaciones que duran más tiempo", agrega.

La historia china de los dos argentinos ha registrado los cambios del país en 18 años, y esta historia continuará. "En mi familia siempre hubo una influencia positiva acerca de China", comenta Esteban, quien, con una sonrisa, concluye:"Es hacer sin hablar tanto".

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Enfoque de China: Padre e hijo argentinos relatan su relación común con China

Spanish.xinhuanet.com 2017-11-10 20:55:27

BEIJING, 10 nov (Xinhua) -- Son dos argentinos: padre e hijo; uno, de edad avanzada, el otro, en su etapa más productiva; uno, vive en México, el otro, en China. A pesar de las diferencias, ambos son sinólogos y su historia con China refleja los grandes cambios del país asiático.

Para el padre, Aníbal Zottele, China es una vieja amiga. "Mi primer acercamiento fue cuando era muy joven, en la década de los sesenta", recuerda.

Por aquel entonces, China no era más que un país exótico para América Latina. "Como todos los jóvenes latinoamericanos con intereses en la política, me llamó la atención China por ser una referencia, y por su revolución como una posibilidad de cambiar las cosas en el mundo", según Aníbal.

La medicina veterinaria fue la especialidad original de Aníbal, menos relacionada con los estudios chinos. En los años ochenta, era asesor de sanidad animal en varias organizaciones internacionales. Sobre China, entonces menos desarrollada que actualmente, le llamó la atención una medicina de ganso que era muy usada en el campo.

Aníbal encontró que, con esta medicina, China "mejoraba la calidad de vida de la población".

El hijo, Esteban Zottele, empezó su historia con China en 1999, cuando visitó China como turista. El país asiático le sorprendió "por su historia, pero también por su futuro".

En 2004, Esteban decidió trasladarse a China. Obtuvo un doctorado en la Universidad de Renmin, abrió un restaurante de comida mexicana en Beijing y ahora trabaja en el Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Changzhou.

Para el padre, este viaje de Esteban también "fue decisivo en mi vida". Al conocer los cambios de China, Aníbal decidió dedicarse a los estudios chinos, publicó varias tesis sobre la modernización china y fue nombrado coordinador en el Centro de Estudios Chinos de la Universidad Veracruzana en 2008.

Según Aníbal, en esos años los estudios chinos eran novedosos. "Los economistas occidentales sólo veían el crecimiento en Japón, hablaban de la experiencia coreana, pero muy pocos estaban viendo lo que está sucediendo en China", recalca.

Y para el pueblo, el país oriental es aún más desconocido, "Cuando me invitaron en la Universidad Veracruzana en 2005," recuerda Aníbal, "todavía en esos años muchos mexicanos se preguntaban por qué un centro de estudios sobre China, y no sobre Bélgica o Francia, ya que se veía a China como un país más pobre".

Esteban cree que la clave del conocimiento mutuo se encuentra en la comunicación entre las personas. "La cultura de un país se puede conocer a través de libros, programas de televisión o películas, pero es el intercambio entre las personas el paso más importante para que se genere un profundo intercambio cultural", apunta.

Para promover este intercambio de personas, Esteban fundó en Beijing este septiembre la Asociación de Argentinos en China, que considera las asociaciones de chinos en el extranjero como sus modelos.

"Los chinos en Argentina cada día se integran más entre sí y con la comunidad local. También ha crecido la presencia de argentinos en China", comenta Esteban. Considera la asociación como "una plataforma para que los argentinos podamos difundir la cultura de nuestro país y ayudarnos mutuamente", añade.

Para ambos, el recién concluido XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China (PCCh) tiene mucha importancia. Aníbal elogia la decisión del PCCh de integrar el contenido sobre la Franja y la Ruta en los Estatutos del Partido. Lo considera como una gran oportunidad para los países en vía de desarrollo.

A Esteban le impresiona la gobernanza del PCCh. "China está planificando un camino a largo plazo", destaca. "Debemos cooperar con China, no sólo para esta mejora, sino también para aprender cómo en América Latina podemos tener planificaciones que duran más tiempo", agrega.

La historia china de los dos argentinos ha registrado los cambios del país en 18 años, y esta historia continuará. "En mi familia siempre hubo una influencia positiva acerca de China", comenta Esteban, quien, con una sonrisa, concluye:"Es hacer sin hablar tanto".

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