BEIJING, 19 oct (Xinhua) -- El crecimiento de las inversiones en activos fijos de China continuó con un ritmo más lento en los primeros nueve meses del año, pero con una estructura optimizada debido a que el país se centró en la calidad del crecimiento, según los datos dados a conocer hoy jueves por el Buró Nacional de Estadísticas (BNE).
En concreto, estas inversiones crecieron un 7,5 por ciento de enero a septiembre, ligeramente por debajo del 7,8 por ciento registrado entre enero y agosto, de acuerdo con el BNE.
El ritmo, que supone un descenso de 0,7 puntos porcentuales con respecto al mismo periodo de 2016, representa que la desaceleración del crecimiento acumula seis meses consecutivos.
El portavoz del BNE, Xing Zhihong, señaló que la inversión había sido crucial para fortalecer los enlaces débiles, impulsar la reestructuración económica, estimular la innovación y mejorar el bienestar del pueblo.
La inversión en infraestructuras, que representa más del 20 por ciento del total de este tipo de inversiones, subió un 19,8 por ciento interanual de enero a septiembre.
Xing afirmó que, aunque China ha experimentado un rápido desarrollo en sus infraestructuras, los enlaces débiles aún existen y los gastos en este sector mantendrán un fuerte crecimiento.
El vocero no especificó los enlaces débiles, pero recalcó que se han canalizado más inversiones en infraestructuras en áreas como la protección ambiental, la construcción de carreteras y las renovaciones de las instalaciones públicas este año.
Como China está tratando de transformar la economía nacional hacia un modelo de crecimiento propulsado por el consumo, la innovación y los servicios, la inversión se destina a los sectores de alta tecnología.
Durante los primeros nueve meses, la de manufactura de alta tecnología aumentó un 18,4 por ciento, por encima del 11,7 por ciento registrado en el mismo periodo del año pasado.
La inversión en el sector privado creció un 6 por ciento en los primeros tres trimestres, cifra que representa el 60,5 por ciento del total y está por debajo del 6,4 por ciento registrado de enero a agosto, según el BNE.
Por su parte, la inversión en desarrollo inmobiliario se expandió a un ritmo más rápido del 8,1 por ciento durante ese periodo, frente al 7,9 por ciento de los primeros ocho meses del año.
A medida que el gobierno mantuvo el control sobre la adquisición de propiedades inmobiliarias para contener la especulación, el incremento de las ventas de las vivienda se desaceleró.
Las ventas de vivienda en término de superficie del piso subieron un 10,3 por ciento entre enero y septiembre, en comparación con el 12,7 por ciento del periodo enero-agosto, en tanto que el crecimiento de las ventas en concepto de valor también se desaceleró hasta el 14,6 por ciento, por debajo del 17,2 por ciento.
