BRUSELAS, 3 oct (Xinhua) -- Las propuestas para Europa presentadas por el presidente de Francia, Emmanual Macron, y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, aunque son "visionarias" y "útiles", carecen de planes concretos, indicó un experto europeo.
Giles Merritt, presidente del grupo de expertos belga Friends of Europe, dijo que el discurso pronunciado por Macron el 26 de septiembre en la Universidad de la Sorbona y el informe del Estado de la Unión de Juncker del 13 de septiembre en el Parlamento Europeo fijan el rumbo, pero no la forma de llegar.
Macron pidió una "profunda transformación" de la Unión Europea (UE) en el maratónico discurso. Entre otras cosas, propuso una mayor cooperación militar y el establecimiento de un ministro de Finanzas, un presupuesto y un Parlamento comunes para la eurozona.
El europeísmo expresado por el presidente francés contrasta con las elecciones alemanas, en las que el partido de extrema derecha Alternativa por Alemania (AfD) consiguió una posición en el Bundestag, el Parlamento alemán, como la tercera mayor fuerza.
En su informe del Estado de la Unión, Juncker mencionó "seis escenarios" para el futuro de Europa que descartan la "Europa de múltiples velocidades" prevista en el libro blanco publicado en marzo por la comisión. Juncker optó por amenazar para lograr una mayor integración en la mayoría de los ámbitos de funcionamiento europeo.
Los dos presidentes compartieron la misma tónica respecto de una unión de defensa europea más integrada y de una administración más amplia de la inmigración.
Pero a diferencia de Macron, Juncker no consideró establecer un presupuesto y un Parlamento comunes para la eurozona y afirmó que el euro está destinado a ser la moneda común de toda la UE y que el Parlamento Europeo es la única institución legislativa de la eurozona.
Merritt elogió la agenda de los dos presidentes "en este momento dramático" y dijo que Europa necesita "una agenda de integración más ambiciosa y más rápida".
Sin embargo, el experto no apoyó con fuerza sus visiones porque "cuando uno propone cambios drásticos en la construcción del proyecto de la UE, se tienen que presentar los detalles".
"La brecha norte-sur (en la UE) se está ampliando y eso es muy peligroso para la unidad europea. Esto significa crear un nuevo mecanismo de gobernanza que permita a los alemanes monitorear a dónde se van los recursos", dijo Merritt, en referencia a la preocupación de los alemanes por la "irresponsabilidad" de algunos Estados miembros que derrochan sin reparo el dinero en bienestar social.
El discurso de Juncker "fue un triunfo de la esperanza sobre la realidad. Estableció una visión que ignoró algunos problemas fundamentales, siendo el más grave el movimiento hacia el populismo y el nacionalismo".
Merritt resaltó que en las diversas elecciones de este año, cada vez más votantes de la UE fueron seducidos por las "soluciones fáciles" de los partidos populistas que aprovechan el creciente distanciamiento entre las instituciones de la UE y los ciudadanos comunes y corrientes.
La creciente impopularidad de los proyectos de la UE entre los ciudadanos ordinarios también es causada por la sensación de que las "grandes decisiones" de la UE sobre inmigración han ido demasiado lejos, afirmó el experto, quien señaló que la UE deja que los Estados miembros desempeñen un mayor papel.
"Estas son las raíces de los sentimientos de separatismo contemporáneos en España, Bélgica, etc. Tenemos que seguir siendo grandes y competitivos a nivel global, pero tenemos que eliminar parte del centralismo de la UE", señaló.
"Pintar un 'cuadro dorado' no es útil. Creo que todos los líderes de la UE deben empezar a decirles a los ciudadanos las cosas incómodas en contraste con las 'soluciones fáciles' imposibles propuestas por los populistas", dijo Merritt.
