BEIJING, 31 ago (Xinhua) -- La decisión de China de aumentar de manera ostensible el suministro de casas para arrendar, busca brindar una solución de largo plazo al sobrecalentamiento de su mercado inmobiliario, según analistas.
El país asiático lanzará programas piloto en 13 de sus ciudades más importantes, entre ellas Beijing, Shanghai y Guangzhou, para construir viviendas destinadas al arriendo en terrenos rurales, dijeron fuentes oficiales. Muchos de esos proyectos estarán listos hacia finales de 2021. Después, la estrategia será replicada en otras regiones.
Organizaciones económicas colectivas de origen rural serán autorizadas a construir y alquilar casas en regiones campesinas a título propio o bajo la modalidad de empresas conjuntas, de acuerdo con los ministerios de Tierra y Recursos y de Vivienda y Desarrollo Urbano-Rural.
El objetivo de la estrategia es incrementar la oferta de espacio arrendable y establecer un sistema de vivienda que sea justo tanto para arrendadores como para arrendatarios, según expertos.
Por largo tiempo, los elevados precios de la vivienda han supuesto una gran presión para los habitantes de las ciudades chinas, tanto así que garantizar el acceso a lugares de habitación dignos y asequibles se ha convertido en un dolor de cabeza para los formuladores de políticas. Ahora estos consideran que la salida es fortalecer el mercado del alquiler, lo que permitiría estabilizar los precios y poner freno a la especulación.
Un funcionario del Ministerio de Tierra y Recursos, quien solicitó mantener su nombre en reserva, dijo que la medida sigue la línea de las opiniones expresadas por las autoridades centrales en la Conferencia Central de Trabajo Económico celebrada en diciembre, en el sentido de que "las viviendas se construyen para ser habitadas, no para convertirlas en objeto de especulación".
"La mentalidad de la regulación inmobiliaria de China ha cambiado de una de corto plazo a una de largo plazo", manifestó Kang Junliang, de la Asociación de Bienes Raíces de China.
Las medidas a largo plazo incluyen un sistema nacional de registro de propiedades y tierras, regulaciones de alquiler orientadas por el mercado y un mecanismo de regulación de suministro de tierras clasificadas, reveló Kang.
Recientemente, China ha adoptado una serie de medidas para estabilizar el mercado de la vivienda y contener la especulación.
El 17 de julio, las autoridades de la ciudad meridional de Guangzhou decidieron otorgar los mismos derechos de acceso a la educación tanto a propietarios como a arrendatarios. En numerosas ciudades chinas, el derecho a matricular a los niños en la escuela lo disfrutan solo quienes son dueños de bienes inmuebles. Guangzhou, capital de la provincia de Guangdong, es la primera de las ciudades de primer nivel del país que concede este derecho a los hijos de quienes viven en casas alquiladas.
Tres días después, el Ministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano-Rural, junto con otras entidades oficiales, emitió una nota en la que anunció que en ciudades con ingresos netos de población se tomarían medidas como aumentar la oferta de espacio arrendable y el establecimiento de una plataforma de servicio para la renta de viviendas respaldada por el gobierno.
A comienzos de agosto, el día 4, el gobierno municipal de Beijing hizo público un documento para solicitar opiniones de la ciudadanía. El documento propone que los compradores individuales puedan pagar solo una parte del precio total de una casa pero disfrutar de "todos los derechos de uso", como si fueran sus propietarios.
Chen Zhi, secretario general de la Asociación de Bienes Raíces de Beijing, dijo que los nuevos inmuebles hacen parte de los controles de larga duración con los que la ciudad busca establcer un sistema más justo, que permita a más gente adquirir casa propia.
La política tiene varias restricciones para los compradores. Por ejemplo, ni ellos ni sus familiares pueden ser ya propietarios de vivienda, las personas solteras que quieran beneficiarse deben ser mayores de 30 años, y cada familia puede postular solo por una casa.
"La nueva regulación inmobiliaria claramente está orientada a los hogares que tienen dificultades para comprar vivienda", dijo Liu Weimin, del centro de investigación de desarrollo del Consejo de Estado, el gabinete chino.
Deng Liang, un abogado basado en Beijing, dijo que las nuevas casas podrán satisfacer mejor la demanda y contener efectivamente la especulación.
El país implementará un mecanismo de largo plazo y orientado por el mercado que pueda desinflar las burbujas del mercado inmobiliario y prevenir fluctuaciones erráticas, según la declaración emitida al término de la Conferencia Central de Trabajo Económico.
El gobierno usará tierras, inversiones, legislación e instrumentos fiscales, tributarios y financieros para alcanzar dicho objetivo, según el documento.
El mercado de la vivienda de China ha empezado a dar señales de enfriamiento, con los precios creciendo más lentamente, e incluso cayendo, en varias ciudades de primer nivel, como resultado de las agresivas medidas adoptadas por la administración.
