MOSCU, 10 jul (Xinhua) -- Rusia y Estados Unidos continuarán su cooperación en Siria con base en un acuerdo trilateral con Jordania para promover una zona de distensión en este país azotado por la guerra, dijo hoy el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov.
"Aunque a partir de ayer desde las 12:00 hora de Siria entró en vigor el régimen de cese al fuego, éste tiene que reforzarse, por lo que habrá mucho trabajo que hacer ahí", dijo Lavrov en una conferencia de prensa.
El viernes, Rusia, Estados Unidos y Jordania lograron un acuerdo para apoyar un cese al fuego en el suroeste de Siria, estableciendo una zona de distensión para crear un ambiente apropiado con el fin de lograr una solución política a la situación en el país de Medio Oriente.
Lavrov dijo que el acuerdo prevé la elaboración de detalles adicionales sobre el funcionamiento práctico de la zona.
Para coordinar esos detalles, se acordó poner en operación un centro de monitoreo, creado por Rusia, Estados Unidos y Jordania, en la capital jordana de Ammán, que estará en permanente contacto con las fuerzas del gobierno de Siria y la oposición, dijo.
Lavrov dijo que los participantes en las conversaciones sobre Siria en Astaná, capital de Kazajistán, se acercaron a un acuerdo para establecer otras dos zonas de distensión en la región occidental de Homs y en la región oriental de Ghouta, y las conversaciones continúan sobre otra zona en el estado nororiental de Idlib.
Lavrov señaló que Rusia da la bienvenida a la "activa participación" de Estados Unidos en el proceso de Astaná y continuará alentándola, a pesar del estatus de Washington como observador en las conversaciones.
El canciller añadió que Moscú también mantuvo estables contactos con Washington en las conversaciones en Ginebra, que reiniciaron hoy, así como con otros países clave, los cuales influyen en los acontecimientos en Siria.
"Tenemos que considerar las actitudes de un gran número de involucrados cuando se refiere a la solución y no es fácil reconciliar esas posiciones y encontrar un equilibrio de intereses. Pero como lo demuestra el acuerdo del 7 de julio entre Rusia, Estados Unidos y Jordania, sí es posible", señaló Lavrov.
La guerra de Siria, que ha llegado a su séptimo año, ha dejado cientos de miles de muertos y alrededor de 6,3 millones de desplazados en el país y 5,1 millones de personas han sido forzadas a huir como refugiados más allá de sus fronteras nacionales.
En meses recientes, la situación ha sido particularmente angustiosa en Raqqa, donde se lanzó una ofensiva para recuperar la ciudad de manos del grupo terrorista Estado Islámico. Alrededor de 25.000 personas han huido de la ciudad desde que iniciaron las operaciones militares. Sin embargo, unos 100.000 civiles podrían aún estar atrapados ahí.