HONG KONG, 1 jul (Xinhua) -- El presidente de China, Xi Jinping, marcó hoy sábado una "línea roja" para el manejo de las relaciones entre la parte continental de China y Hong Kong, advirtiendo contra cualquier intento de socavar la soberanía nacional o desafiar el poder del gobierno central.
"Cualquier intento de poner en peligro la soberanía y seguridad nacionales, de desafiar el poder del gobierno central y la autoridad de la Ley Básica de la Región Administrativa Especial de Hong Kong (RAEHK) o de utilizar Hong Kong para realizar actividades de infiltración y sabotaje contra la parte continental de China es un acto que traspasa la línea roja, y es absolutamente inadmisible", recalcó.
Xi hizo estas declaraciones durante su participación en una reunión que conmemora el 20º aniversario del retorno de Hong Kong a la patria y en la ceremonia inaugural del quinto gobierno de la RAEHK.
El pueblo de Hong Kong goza de una libertad y derechos democráticos más extensivos ahora que en cualquier otra época de la historia, recordó el mandatario chino.
"El pueblo de Hong Kong, ahora dueño de su propio hogar, gestiona los asuntos locales dentro de la esfera de autonomía de la RAEHK", señaló Xi.
El presidente destacó la importancia de entender correctamente la relación entre los conceptos de "un país" y "dos sistemas".
El concepto de "un país, dos sistemas" fue presentado, primero y ante todo, para lograr y defender la unidad nacional, recalcó.
"En los asuntos cotidianos, debemos tener como guía un fuerte sentido de 'un país', cumplir firmemente el principio de 'un país', y así tratar correctamente la relación entre la RAEHK y el gobierno central", explicó.
Por otro lado, los "dos sistemas" deben y pueden con toda la razón convivir con armonía y reforzarse el uno al otro sobre la base de "un país".
"Debemos adherirnos al principio de 'un país' y respetar las diferencias de los 'dos sistemas'", apuntó el presidente.
El gobierno central implementará inquebrantablemente la política de "un país, dos sistemas" y garantizará que se aplique plenamente en Hong Kong, sin manipulaciones ni distorsiones, destacó.
PELIGRO DE RUPTURA INTERNA
Hong Kong no puede permitirse ser destrozada por actos irresponsables o rupturas internas ante la intensa competición global, advirtió Xi.
Hong Kong es una sociedad plural con "diferentes opiniones e incluso graves diferencias en ciertos asuntos específicos", reconoció el jefe de Estado.
No obstante, "politizar cualquier tema o crear diferencias deliberadamente y provocar la confrontación no resuelve los problemas", previno. "Al contrario, sólo perjudica gravemente el desarrollo económico y social".
"Hong Kong es una sociedad próspera, pero también se enfrenta a enormes desafíos generados por los profundos cambios en las circunstancias económicas globales y la cada vez más intensa competencia internacional", señaló.
"Es imperativo mantener siempre un ambiente social armonioso y estable", apuntó Xi, que añadió que "la armonía brinda buena fortuna, mientras que la discordia trae desgracias".
El concepto de "un país, dos sistemas" expresa la visión de la paz y armonía en la cultura china, y encarna el muy importante principio de buscar una base común amplia mientras se dejan de lado las mayores diferencias.
"Por parte del gobierno central, estamos dispuestos a hablar con cualquiera que ame el país, ame Hong Kong y que apoye sinceramente el principio de 'un país, dos sistemas' y la Ley Básica de la RAEHK, sin importar qué punto de vista o posición política tenga", manifestó.
MÁXIMA PRIORIDAD AL DESARROLLO DE HONG KONG
Xi instó a Hong Kong a que siempre haga del desarrollo la mayor prioridad.
"El desarrollo, un objetivo obligatorio, es crucial para la supervivencia de Hong Kong y cotiene la llave maestra para la resolución de varios asuntos de Hong Kong", expresó Xi.
El rápido y continuado desarrollo de la parte continental a lo largo de los años brinda una oportunidad inestimable, una fuente inagotable de fortalezas y un gran espacio para el desarrollo de Hong Kong, aseveró el presidente.
El gobierno central seguirá apoyando a Hong Kong en el crecimiento de su economía y en hacer uso de sus poderes y su papel en la promoción de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, la Gran Área de la Bahía Guangdong-Hong Kong-Macao, la internacionalización de Renminbi y otras estrategias, prometió.
"Es importante poner al pueblo en primer lugar, ayudarle a superar las dificultades, especialmente en la resolución de las cuestiones económicas y de sustento prominentes por las que la gente se preocupa", dijo el mandatario.
El gobierno central continuará dando su apoyo a la jefa ejecutiva y al gobierno de la RAEHK en el ejercicio de la gobernanza basando en la ley, expresó Xi.
"Estoy convencido de que la práctica de 'un país, dos sistemas' en Hong Kong entrará en un nuevo capítulo", manifestó.