RIO DE JANEIRO, 20 jun (Xinhua) -- El presidente de Brasil, Michel Temer, evitó hoy hacer comentarios sobre el informe divulgado el lunes por la policía, en el cual se señala que pudo haber incurrido en delitos de corrupción pasiva.
"Vamos a esperar, eso es un juicio jurídico y no político, yo no hago un juicio jurídico", dijo Temer a periodistas tras un acto con empresarios e inversores rusos en Moscú.
La policía brasileña afirmó en un reporte parcial que Temer y su ex asesor y ex diputado, Rodrigo Rocha Loures, detenido el pasado 3 de junio por transportar una maleta con 500.000 reales (150.000 dólares) y acusado por el empresario Joesley Batista como la persona encargada de recibir los sobornos, pudieron incurrir en delitos de corrupción pasiva.
Durante el primer acto en su visita a Rusia, el presidente elogió el papel del Congreso brasileño en su administración, en un momento en que los legisladores se preparan para analizar una denuncia contra Temer como parte de la operación "Lava Jato" (lavadero) que investiga la red de corrupción en la petrolera estatal Petrobras.
La Procuraduría General de Brasil debe presentar en los próximos días una acusación formal contra Temer, tras la delación de los ejecutivos de JBS.
La Constitución brasileña establece que esa denuncia podrá transformarse en juicio solamente si existe la aprobación por parte del plenario de la Cámara de Diputados, con el voto de por lo menos 342 de los 513 integrantes.
De ser así, Temer puede ser apartado del cargo mientras se abre una investigación en su contra.
En una entrevista al semanario brasileño "Veja" publicada el sábado anterior, Batista acusó a Temer de ser "el jefe de la mayor y más peligrosa organización criminal" de Brasil, ante los cual el mandatario anunció que lo demandará en los tribunales por daños morales, difamación calumnias e injurias.